s, tenéis que poner de vuestr
eto, y me cruzo de brazoarcajada, haciendo que el oficial golpee con
o –, estáis en un jodido reformatorio, y si no queréis ir directos a la cá
racia, sí
me jodas
nrisa orgullosa, he conseg
e nos reformemos? –pregu
comprender y toca su enorme barriga suspir
dos a lo largo de la mesa de metal bufamos
verdaderamente malas ante la ley, pero nos la suda completamente eso.
ter en un proy
e la mesa intentando saber si es
enemos que hacer? ¿Ca
de tenerme miedo e inventar rumores falsos del porqué de mi
e? –ruge el oficial, des
ber que puto p
o por uno con una mueca en los labios. Suspiro cansado por tanto suspense y golpeo la
–. Azael, siéntate
o la silla y me sien
do que puede haber en todo el jodido reformatorio, es una puta
ge el chico que hay
prefiero no saber nada de nadie de aquí, ni siquiera d
ltimo año, necesitáis relacionaros con otro tipo de gente, por lo que iréis por las
r de aquí echando hostias, y poder salir aunque sea unas horas me vale, aunque sea para un puto instituto. Llevo tres año
os no tiene problema con ello y nos deja salir de la
a Elías mordiéndose el labio –, estoy harto de paje
a por mi lado casi corriendo, y me río al ver lo cagado
i no fuera por las paredes llenas de tías desnudas y la ventana que da al exterior, me moriría de asco en este sitio. Varias veces he intentado escaparme, pero los hijos de puta tienen a un vigilante debajo de cada ventana, y en cada pasillo de la planta de las habila de vodka en cuan
a sacar botellas vacías de v
una puta mierda, incluso las camas, se te clavan los muelles en la espalda y te dejan jodido, por no hablar que por las noches apagan las luces a las diez, y da gracias que hay ventanas para que
olpeando con fuerza la p
pesadez y saludo a mi am
ama Elías lanzando un z
ongo que ha usado para golpear la puerta. Todos los días se hacen turnos para llamar a nuestra habitación, porq
va y se intenta hacer el gallito. Es un retaco al que con un puñetazo dejaría en el suelo,
a meto por el culo de
–ordena con su pési
bajar a la segunda planta, dónde se encuentran las habitaciones de las chicas, el comedor, y la salida al patio. Ando con las manos en los bolsillos y aparto de mi lado a la misma chica que siempre
s miréi
o que pasa por mi lado a darme su comida, sin rechistar deja la bandeja con
iki, dame tu comida –coge a un chico de la camiseta y
hacia otro lado y mi amigo empie
ras de los mismos gilipollas –gruño, viendo
pollas que nos miran con prejuicios. Todos saben que el crimen cometidos por m
n los oficiales, dando por t
a y espero que todo se vaya
se a duchar y a cambiarnos, cena, y a la cama. Salvo cuando empiezan las clases, que p
a Carlota –co
eguro, y esquivo a unos cuantos gili
antas mierdas para hacer deporte. Cogemos asiento en unas gradas que hay a los pies de la pi
una puta persona de mi familia, si es q