NA JÁ
lví a dormirme hasta que Keyla nos despertó de nuevo, apresurándonos para llegar con t
ó la espalda. ¿Qué hacía él aquí? Me sorprendí mucho cuando escuché que Ethan había venido a mi casa. ¡Un miembro de Chromatic conocía mi dirección! Era una locura. Siempre fui una gran fan de la banda, desde que eran unos adolescentes. Tener a uno de ellos parado en mi sala era surrealista, pero dadas las circunstancias, solo sentía fa
por las fotos se intensificó al verlo ahí, como si él fuera la personificación de todo ese lío.
. Necesitaba hablar c
ara la ilusión justo antes de mi debut. Mañana tengo que trabajar, y tú también, creo que debes irte -dije, sintiendo un nudo en la garganta. Era incapaz de mantener la compostura frente a un mi
os? -preguntó Ethan, con una s
o, me rehúso a creer que me esté hablando de esta mane
mí? -Mi voz temblaba de rabia-. ¿En serio crees que yo haría algo para perjudicarte,
d, Ariana. ¿Editaste la fot
anta. Lo miré con odio. Sarah, al verme tan alterada, se levantó d
que tengas la desfachatez de venir aquí a acusarme! ¡Después de que tu nombre y el de Chromatic están p
itadamente, con el corazón latiendo a mil por hora. La rabia me consumía. No podía creer que Ethan, un integrante de Chromatic, me hubiera acusado de algo tan absurdo. Y, sobre todo, que estuviera poniendo en riesgo la reputación de la banda que tanto amaba. A pesar de mi enojo latente, di la orden estricta de que, si Ethan volvía a insistir, no lo dejaran pasar bajo ninguna circu
uerta contra la pared cuando la abrieron. Yo estaba despierta, aún recostada en mi cama, con los ojos hinchados p
extraña mezcla de nerviosismo por el show y la persistente tristeza por lo de Ethan. No quería que nada empañara este día, pero era imposible ignorar lo que había pasado. Las cuatro mujeres más importantes de mi vida me rodearon, ofreciéndome las palabras justas para ahuyentar el miedo. Cada una con su propio estilo, pero todas coincidieron en un mensaje que se grabó a fuego en mi mente y me acompañó hasta el escenario, justo al lado del de mi madre: «Confío en ti. Escúchame: Llegó el momento de que demuestres
agen de Ethan y su acusación resonaban en mi mente, pero las palabras de mi madre y Keyla, junto con el apoyo silencioso de