NOÉ
e Manson
z una fría mirada siniestra. Me puse de pie con firmeza, imponiéndome sobre el gerente de 45 años que temblaba de ansiedad al enfrentarse a mí, el "Siniestro Manson" como me llamaban. Sinceramente, me importa un bledo. Le miraba fero
bastante seguro de que la casa costó más de lo que debía...- Castillo se interrumpió en su tono rígido, tratando de defenderse,
mi tono controlado, ocultando el repe
e repente, miré a Castillo como un caballero con su traje a m
escapado de las manos. Siempre he conseguido y conseguiré lo que quiero. Aunque tenga que usar mi influencia. Me conocían como Mario el diablo,
írez es profesora- Respondió brevemente
espedí cortándolo en el proceso, y giré enérgicamente sobre
CON
gradable jefe con urgencia. Su jefe es la última persona con la que quiere rela
nombre es la pesadilla de todo empresario, al igual que el de sus empleados, pero adorado y soñado por casi toda
queda a trabajar con Mario Manson. Su única respuesta se
n el paso, demasiado ansioso por salir del de
NOÉ
ue mostraba el último retiro de di
ada perdida en el olvido. Mi mente nadaba con el pensamiento de la hija de Aarón. Momentos después, me encontré encendiendo el esc
Después de ver un montón de enlaces, finalmente, encontré lo que es
a Ra
olutamente preciosa y ni siquiera está maquillada, aunque no estoy
s, cintura diminuta y caderas anchas, estoy seguro de que esas caderas me da
nada se coló en mi lujurioso cerebro y, de repente, me sentí incómodo, totalme
dita
en Facebook d
evo chupapollas? Mi conciencia se burla de
o me llamó la atención. Parecían tan íntimos y ella se veía tan feliz. P
ré la ventana y me quedé mirando la pantalla en blanco del monitor del escritorio de mi Mac co
! Mario Manson está ce
como un tonto. Si alguien me ve, pensará que h
ien acabo de oír hablar hoy y a quien ni siquiera he conocido cara a cara. Me recosté en mi silla y cerré los ojo
yendo sobre mi silla negra de respaldo alto y me acercaba a la pared de cris
ntro de Manhattan, Nueva York. Solté un suspiro mientras miraba a tr