rme de hambre antes que utilizar esos palillos, dicen que compartir
mis compañeros, ese monstruo ni siquiera se sentía apenado, no me pedía per
as galletas en mi mesa, el maestro acababa
r, de manera torpe, su ele
finas y delicadas o que mi voz sea medianamente ligera, debo ser tremendamente escandalosa, para nada puedo esc
empre tarda. - Era demasiado perfecta para ser real, para ser de mi edad, tiene el port
que yo solo miraba apuntes que no lograba entender, por mas que leía las hojas no lograba entender na
a un largo rato con sus infantiles sonidos quejumbrosos, entren suspiros y muecas, un arr
s tú responsable de tu desastre y las migajas? - Me quito una gall
- Me dijo ella, quien también le ponía car
la voz baja, apenada de que se metie
e algunos estudiantes, Hana, n
te metas conmigo. - el monstruo me quitó otra galleta y luego el paq
ecer con todos, no vea que alguien le hablara o que hiciera el intento de ser su amigo, D se veía más rebelde, con el cabello más largo, el uniforme desaliñado y todos sus cuadernos en blan
ón. - Le quito las galletas, parecía que comenzaran una pelea,
oncierto, estaba bastante nerviosa con todo esto que unas simples galletas e
n el auto estudio
algo dulce para no desmayarme, cuando el profesor llegó a la clase, no podía retroceder con lo de las galletas, sólo podía calmar mi hambre con mucha agua y concen
, me odiaba por mis malas elecciones, debí comerme el último trozo de carne
fresco, comida, algo dulce, puedo sentir que la vi
s para su clase. - Era el príncipe, su voz me devolvió a la
de no recordar ningún nombre, era curioso que desarrollara ecua
nte, puso las guías en la mesa del maestro y se retiró
uno pase por un
aunque no conozco su nombre, no podría tener
, eso creía hasta que v que no sobró ninguna y Lian sacó una guía de su mochila, esa era la guía
tien
arme como si fuera tu amigo? - un