Y
e? Le das una patada en el trasero y la
o desahogo en el alcohol. No hace falta decir que cada maldito día de mi vida, luego de que ella se marchara, me llené de rabia, sentimiento que creció cuand
a música. Tomé una pequeña maleta, un poco de dinero que dejó mi papá y me largué a Los Ángeles; donde supuestamen
rra y cuando conseguí mi primer sueldo fue lo primero que hice. Conocí a mucha gente y a los pocos meses me junté con chicos con los mismos proble
ando tocaba la guitarra, te elevaba sin necesidad de meterte ninguna droga. Al igual que cada uno de nosotros, él también tenía su historia. Su padre lo abandonó siendo muy pequeño, dejándolo
k no hay nadie como él en ese instrumento, sus líneas de bajo son tan melódicas, posee una excelente técnica y ejecución, por mi parte en un principiéramos unos delincuentes juveniles, destruimos carros, partíamos ventanas, nos metíamos en peleas cada cinco minutos; era nuestra forma d
ábamos en un papel, que luego se convertían en las letras de nuestras canciones. Nadie daba med
ue nos cansamos y allí totalmente narcotizados, escribimos una canción mientras que Ryan en la guitarra acústica le daba vida con unos
partíamos caras y pateábamos traseros, nos sacaron corriendo de muchos pueblos. Hasta que un buen día un productor cazatalentos nos escuchó y eso bastó para que nos ofreciera
estro manager, abrió la cortina de mi habitación, y de
a de quien era, pero si vi que era muy guapa y si no hubiese sido
ombre era un pan de Dios, nosotros íbamos a acabar con él, era lo que siempre decía. Busqué en
ubrió con la sabana y sali
regunté sentándome en la cama, vi
ocasionaron fuera del hotel, y toda la cocaína que dejaron en la recámara servía para que la ciudad entera la inhalara y los empleados en
en ventas y habíamos terminado nuestra primera gira con rotundo éxito, así que lo celebramos a lo grande como se debe. Alguien hizo algu
rle el ánimo -pero tú estás perfectamente calificado para reso
r que son artistas, por lo tanto, tienen que comportarse mejor... La atención pública está puesta en la banda y tú, cabrón, es el que debe guardarse
tras pequeñas fiestas, nos
Quiero seguir durmiendo, ya que me
chaste todo lo que te he dic
demás ¿qué tiene de malo divertirse? -Yo solía ser bastante volátil cuando alguien osaba gritarme, pero Greg me rec
- el manager caminó por toda la habitación mientras yo lo miraba atentamente y aguantaba las ganas de reírme - ustedes - me señaló - serán una banda m
la mariconada que había soltado el imbécil. Se ve que todavía no no