Hannah es una adolescente algo problemática y caprichosa, su madre se divorció de su padre cuando ella tenía ocho años y se volvió a casar con un hombre rico llamado Henry Evans. Hannah se enamora de su padrastro, al punto de encapricharse y obsesionarse, pero nunca intenta nada ya que respeta la relación de su madre, pero una noche, las cosas entre ellos dos cambian por completo y Henry se ve envuelto en un extraño triángulo amoroso.
Escucho a la distancia los gritos y discusiones, el pan de cada día, no importa cuántas veces escuche esto, me irrita y me molesta bastante, creí que cuando mi madre se había separado de mi padre esto terminaría o al menos eso decía, pero nada ha cambiado, eso me hace ver que el problema no era mi papá, sino mi mamá, pero claro ¿Quién son yo para decírselo? Mi madre le grita a mi padrastro, Henry, que está harta de toda esta mierda y que quiere que la deje tranquila, mi padrastro sale de su habitación a toda prisa, puedo escuchar como aporrea los pies contra el suelo y va escaleras abajo, me a
comodo en mi lugar y termino de preparar el té de Henry.
Veo como entra a la cocina y busca la tetera, escucho como refunfuña entre dientes, furioso por la resiente discusión, mientras lo observo caminar, no puedo evitar recordar la primera vez que lo vi, creí que era mi salvación, que me llevaría lejos de todas esas peleas, claro que, nuestro primer encuentro fue algo turbulento, ya que casi me atropella por estar viendo el celular buscando una dirección. Ese día a mi madre casi le da un infarto.
Al no encontrar la tetera, Henry detiene su paso, todavía me está dando la espalda, apoya sus manos sobre la meseta y veo como inhala y exhala con exasperación, frustrado y molesto; pobre hombre, le hemos venido a arruinar y joder la vida, creo que esperaba que su vida fuera tranquila y llena de amor, pero resultó ser todo lo contrario.
- ¿Que buscas, papi?
Al escuchar mi voz, da un pequeño salto en su lugar y se gira hacia mí rápidamente, deja caer los hombros y se disculpa conmigo, diciéndome que no me había visto, no pude evitar reírme, luego deslicé su taza en su dirección, baja la mirada hacia la isla y se acerca a mí, besa mi frente y me agradece por haberle preparado su té.
No puedo dejar de contemplarle mientras bebe su té, Henry es un hombre realmente hermoso, al notar mi mirada posada sobre él, baja un poco su taza y me mira por el rabillo de sus ojos, luego hace un ligero movimiento de cabeza, preguntándome con gestos que se me ofrece.
-Lamento que las cosas con mi madre no salgan como esperabas.
Deja su taza sobre la isla y se acerca a mí, luego posa sus manos sobre mi cabeza y la acerca a su cuerpo, quedando sobre su abdomen, aspiro con algo de fuerza su embriagante perfume, tengo que apretar las piernas por lo excitada que estoy.
-Tranquila, cariño- Besa mi cabeza. -No es culpa tuya, son cosas de adultos y no es algo de lo que debas preocuparte.
Paso mis brazos alrededor de su cintura y lo aprieto con fuerza, restregando mi mejilla contra su abdomen, este se siente algo duro y firme. Alcé la mirada y contemplé su rostro por unos momentos y volví a bajar la mirada.
-Ya casi es hora de que te vayas a dormir, cariño- Vuelve a besar mi frente y frota con fuerza mis brazos. -Ve a descansar y no te quedes hasta tarde viendo tu celular.
Asentí con la cabeza, no tengo ganas de soltarlo, estar entre sus brazos me reconforta bastante y me hace sentir protegida y no de una forma paternal, como pasaba con mi madre y padre. Recuerdo que cuando mis padres terminaban de discutir, mi mamá se iba a su cuarto a llorar de forma desconsolada, en esos momentos, me acercaba a ella y ella me abrazaba con fuerza, diciéndome que no debía preocuparme, pero ¿Cómo no hacerlo? Tiraban muchas cosas al suelo, gritaban tan fuerte que muchas veces iba la policía a hacernos visitas.
Lentamente me levanté de mi asiento, pegando mi cuerpo al suyo, besé su mejilla y le di las buenas noches a Henry, diciéndole que espero que en esta ocasión me dejen dormir, que de lo contrario tendría que irme a la casa de mi papá, esto lo dije como chiste, pero mi papi no se lo tomó para nada bien, ya que me dijo que no quiere que me vaya de la casa; a Henry no le gusta mucho que pase tiempo con mi papá y no es que me fascine estar con él, ya que, desde la separación de mis padres él casi no me habla y le he mandado varios mensajes, pero nunca recibo respuesta. Me fui escaleras arriba, tomando entre mis brazos a mi perrito pastelito, que fue un regalo que me hicieron para que "aceptara" su relación, les preocupaba mucho que no lo aceptará.
Mientras subo las escaleras, le doy varios besitos a mi perrito, que no deja de mover la cola y de lamer mis mejillas, luego llego a mi cuarto y cierro la puerta con suavidad, no quiero que la histérica de mi madre me regañe por "azotar" la puerta. Dejé a pastelito en el suelo y este enseguida se metió debajo de mi cama con entusiasmo, reí levemente y me metí entré mis cobertores.
Estando acostada en mi cama, miro el techo por un largo rato y no puedo dejar de pensar en la cercanía con Henry, mi mano derecha se desliza por mí entrepierna y lentamente empiezo a acariciar mi coño, haciendo que algunos gemidos se me escapen, en poco tiempo me encuentro frotando mi clítoris con fuerza, susurrando el nombre de Henry con suavidad.
Escucho el canto de los pájaros a la distancia, de forma perezosa me meto entre las sábanas, deseando que siga siendo de noche, no tengo ganas de levantarme ni de escuchar las pendejadas de mi madre y Henry. Mi perrito rasca la puerta con desesperación mientras chilla; recuerdo que cuando vivía con mis padres, mi papá nunca me permitió tener mascotas ya que no le gustaba y más que decía que no me haría cargo del animalito. Refunfuñe molesta al ver que él seguía chillando, pero antes de que pudiera poner un pie afuera, la puerta se abre y pastelito sale corriendo a toda prisa, luego escucho las maldiciones de mi madre.
-Hannah, me voy al trabajo, no se te olvide bajar a desayunar y le preparas algo a Henry ¿Oíste?
Durante muchos siglos, las cosas entre Zeus y Hera han sido muy dificil, al punto de ser insostenibles, pero repentinamente ambos dioses decidieron apartarse de todo y todos, creando un palacio en los confines del Olimpo. Muchos dioses se sentian curiosos por saber que les sucedia, pero nadie se atrevia a meterse entre ellos, por miedo a la represalias de la diosa Hera. Una noche, el llanto de un bebé pone en alerta a todos los dioses, pero los únicos en tener el valor de ir a investigar son Atenea, Artemisa y Dionisio. Los tres buscan por todo el Olimpo el origen del llanto, hasta que encuentran el palacio de los gobertantes supremos. Tratan de llegar al fondo de la situacion e intentan entrar al palacio, pero son detenidos por unos guardias, Zeus al ver el alboroto decide hablar con sus hijos y les dice que nadie es bienvenido y que los dejen tranquilos. Quince años después, todos los dioses son invitados a una fiesta de cumpleaños.
Ella vive en el inframundo, rodeada de muerte y almas en pena, pero siempre ha creído que la muerte no es el fin, sino el comienzo de algo hermoso. Hades, Dios del inframundo y rey de los muertos, posa sus ojos sobre aquella ninfa que es capaz de ver la hermosura del infierno.
Thomas Collins es un empresario de renombre y está casado con una hermosa modelo, ambos forman la pareja perfecta y la llegada de su pequeño Ethan es el toque perfecto para su vida perfecta o al menos eso es lo que creen todos. Thomas y su esposa tienen una mala relación y con la llegada de su hijo las cosas no mejoran, menos cuando la señora Collins contrata a una niñera, Catherine Blossom, que hará poner en duda el "amor" que siente por su esposa y realmente vale la pena seguir con ella. A Catherine solo le interesan dos cosas, el bienestar del pequeño Ethan y que su padre supere su enfermedad, pero ¿Por cuánto tiempo podrá mantener su mente enfocada en esos dos intereses?.
Eir es una joven nórdica que se dedica a las curaciones al igual que toda su familia, ellos han sido bendecidos por la Diosa de las curaciones Eira, pero su familia no es la única bendecida por una Diosa, ya que Ragnar, el preferido de su aldea también ha sido bendecido por uno, pero no por cualquiera, sino por Odin "El padre de todos" y por el Dios de la guerra Tyr.
La vida de Quinn siempre ha sido tranquila, sin emociones fuertes ni nada fuera de lo normal, de la escuela a su casa y de su casa al trabajo. Todo cambio cuando a su vida llegó un hombre bastante misterioso a la par de amenazador empezó a meterse en su habitacion, jurando que la amaba y que estaba dispuesto a todo por ella, Quinn solo queria que el hombre la dejara y pese a que la noche protegia la identidad de aquel extraño ella sabia que él no era alguien a quien tomar a la ligera.
Anne es una huerfana que quedó a cargo del convento, su camino era volverse una monja, ya se había resignado a su destino, pese a que soñaba ser una enfermera y tener una familia. Alphonse Roux es el ministro de justica, un hombre serio y distante, que, por alguna extraña razón visita el hospital muy a menudo. La joven mujer se ha encargado de curar y cuidar del ministro siempre que acude en su ayuda, durante ese tiempo, ambos han desarrollado un inusual lazo, que, para ojos de Anne... es algo prohibido, pero no para él. Acompaña a esta pareja por un viaje oscuro y siniestro, que se desarrolla en las frías y peligrosas calles de París.
Hace tres años, la familia Moore se opuso a la decisión de Charles Moore de casarse con su amada mujer y seleccionó a Scarlett Evans como su novia. Pero Charles no la amaba. De hecho, la odiaba. Poco después de la boda, Scarlett recibió una oferta de la universidad de sus sueños y se lanzó sobre ella. Tres años más tarde, la amada mujer de Charles cayó terriblemente enferma. Para cumplir su último deseo, él llamó a Scarlett y le presentó un acuerdo de divorcio. La joven estaba profundamente herida por la abrupta decisión de su esposo, pero ella decidió dejarlo libre y aceptó firmar los papeles. Sin embargo, Charles pareció retrasar el proceso deliberadamente, dejando a Scarlett confundida y frustrada. Ahora, Scarlett estaba atrapada en las consecuencias de la indecisión de Charles. ¿Sería capaz de liberarse de él? ¿Charles eventualmente entraría en razón y enfrentaría sus verdaderos sentimientos?
¿Qué esperas de tu cumpleaños? ¿Dinero? ¿Joyería? ¿U otras cosas? Lo que sea, pero por lo menos debe ser un día maravilloso. Lola Li, una mujer linda, encantadora e inteligente, graduada en la comunicación audiovisual a una edad muy temprana. Todo el mundo pensaba que Lola tendría un futuro muy prometedor pero las cosas no salieron como se esperaba. Su fiesta de cumpleaños de 22 años fue una pesadilla para ella. Cuando terminó su fiesta de cumpleaños, su mejor amiga la traicionó, su novio la abandonó y su familia se arruinó por completo. Cuando se despertó al día siguiente, Lola se encontraba tumbada en la cama de una habitación de hotel. Con el corazón acelerado, solo podía recordar vagamente a un hombre extraño con el que estaba anoche. ¿Había venido para salvarla? O, ¿era un demonio que lo estaba persiguiendo?
"Tú no perteneces aquí. Lárgate". Hanna, la hija legítima de Wheeler, regresó sólo para ser expulsada por su familia. Su prometido la engañaba con la hija impostora, sus hermanos la despreciaban y su padre la ignoraba. Entonces, se cruzó con Chris, el formidable líder de la familia Willis y tío de su prometido. "Hagamos como si nunca hubiera pasado", dijo ella. Sin embargo, a pesar de la esperanza de Hanna de separarse, Chris insistió en que fuera responsable. Él amenazó con revelar los verdaderos talentos de Hanna como doctora sobresaliente, guionista brillante y cerebro de un famoso estudio de diseño, obligándola a casarse. Una vez le pidieron a Chris que protegiera a alguien. El destino los reunió en circunstancias delicadas. Él había planeado mantener su promesa y proporcionar un refugio seguro, sólo para descubrir que Hanna estaba lejos de ser la delicada mujer que parecía. Era ingeniosa y astuta...
Madisyn se quedó de piedra al descubrir que no era hija biológica de sus padres. Luego la verdadera hija de esa familia le tendió una trampa, haciendo que la echaran de casa y se convirtiera en el hazmerreír de todos. Creyendo que era hija de campesinos, Madisyn se sorprendió al descubrir que su verdadero padre era el hombre más rico de la ciudad y que sus hermanos eran figuras de renombre en sus respectivos campos. Todos la colmaron de amor, solo para enterarse de que Madisyn tenía un próspero negocio propio. "¡Deja de molestarme!", dijo su exnovio. "Mi corazón solo pertenece a Jenna". "¿Quién te crees que eres? ¿Mi mujer siente algo por ti?", reclamó un misterioso magnate.
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".
La vida era un lecho de rosas para Debra, la hija del Alfa, hasta que tuvo una aventura de una noche con Caleb. Estaba segura de que él era su pareja designada por la Diosa de la Luna. Pero este hombre odioso se negó a aceptarla. Pasaron semanas antes de que Debra descubriera que estaba embarazada. Su embarazo fue una vergüenza para ella y para todos los que amaba. No sólo ella fue expulsada, sino que su padre también fue perseguido por los usurpadores. Afortunadamente, sobrevivió con la ayuda de la misteriosa Manada Espina. Pasaron cinco años y Debra no supo nada de Caleb. Un día sus caminos se volvieron a cruzar. Ambos estaban en la misma misión: llevar a cabo investigaciones secretas en el peligroso pueblo de Roz por la seguridad y la posteridad de sus respectivas manadas. Caleb todavía se mostraba frío con ella. Pero con el paso del tiempo, se enamoró perdidamente de ella. Intentó compensar el abandono de Debra, pero la chica ya no lo quería. Estaba empeñada en ocultarle que tenían una hija y también en hacer una ruptura limpia. ¿Qué les deparaba el futuro a los dos mientras viajaban por el pueblo de Roz? ¿Qué tipo de secretos encontrarían? ¿Caleb se ganaría el corazón de Debra y conocería a su adorable hija? ¡Descúbralo!