Ava Margaret Jones "Avy" estaba cansada, se había esforzado para lograr seguridad y estabilidad económica antes de los 30, tenía una carrera, un buen trabajo, un apartamento, un coche y algunos ahorros en el banco, pero nada de emociones, su día a día era milimétricamente calculado, sin imprevistos , sin aventuras, aun así pensaba que estaba satisfecha con su vida, cuando de pronto uno de sus amigos sufre un accidente automovilístico y se da cuenta de que aún no había vivido su propia vida, resuelta a cambiar esa situación decide crear una lista de cosas que quiere hacer antes de morir. Todo iba según lo planeado hasta que en una de sus aventuras es socorrida por Michael Alexander Williams "Mike", un hombre inteligente, exitoso, arrogante e inhumanamente guapo, éste quedará fascinado por su belleza y personalidad poco convencionales al punto de obsesionarse con la idea de mantenerla a su lado, para persuadirla de involucrarlo en sus aventuras le ofrece un trato, sorprendida e intrigada por las intenciones del hombre más sensual que había visto en su vida Avy decide aceptar, sin saber que con el trato había sellado su destino. ----------------------------------- Querido lector Esta novela es la primera de la serie Jones, muchas gracias por su apoyo constante, quiero más noticias sobre mis novelas, síganme en las redes sociales @marylundhautor
¡Vaya! Si ya son las 6 de la tarde, exhala Avy mientras juntaba más papeles que clasificar para la siguiente semana, el bufete en donde trabajaba F&C Asociados tenía muchos casos pendientes, como asistente legal que esperaba ascender algún día a abogado de la firma, se mataba haciendo los trabajos más pesados, horas extras y trámites que nadie quería hacer, de repente suena su celular, mira la pantalla es una llamada de su madre
- ¡Oh mierda! me olvidé de la cena - poniendo a un lado los papeles atiende la llamada
- Hola mamá, ya sé que estoy atrasada, pero Jeremy me pidió que preparara de último momento unos argumentos para la defensa, trataré de llegar antes de las 8 lo prometo
Cuelga la llamada y empieza a juntar sus cosas, Jeremy su "querido jefe" tendría que esperar, su ira no sería nada comparado a la de su madre si llegara después de las 8 de la noche, probablemente era una de esas interminables cenas para socializar, intentando emparejarla con algún soltero recién llegado a la ciudad, estaba harta de esa rutina, pero no había forma humana de convencer a esa mujer de que estaba bien soltera "por ahora", tenía planes y los estaba logrando, las relaciones nunca fueron lo suyo, pensar en perder tiempo en citas con hombres que solo querían sexo la molestaba, no era que fuese una santa, pero por favor, al menos deberían esperar el postre antes de insinuar que tenían reservado un hotel o invitarle a pasar la noche en su departamento. Ya había reflexionado bastante sobre este punto, ya había pasado por el "seré yo", "es mi apariencia", " es mi atuendo", al parecer nadie la tomaba en serio, no porque no se lo propusiera, si no que nadie veía más a allá de su cuerpo curvilíneo, no nació rubia como su hermana Cassandra, ella no había heredado la belleza de su madre, si no que se parecía a su padre con una tez pálida y cabellos oscuros, unos ojos enormes de color café y unos labios carnosos que hacían envidiar a cualquier chica, apenas si llegaba a los 165 cm de altura. Lo había intentado, lo de ir a las citas, pero después de un par de intentos se dio cuenta de que los hombres solo la veían como una mujer para el sexo, especialmente cuando logró ese puesto en F&C Asociados, incluso sus ex-colegas de la universidad que siempre le tuvieron cierta envidia por sus notas perfectas no habían sido nada discretos en señalar que tal vez ella había logrado ese trabajo usando sus atributos femeninos, se dijo a si misma que no valía la pena discutir con gente tan hipócrita, ella que había pasado gran parte de sus horas libres ayudándolos a repasar para los exámenes, hizo una nota mental para no los volver a invitarlos en ninguna cena de su familia.
Volviendo a la realidad, toma sus llaves, pone su cara de "estoy contenta de estar aquí" y sale del edificio para dirigirse a la casa de sus padres, su madre sin duda se quejará por su apariencia actual, ella siempre le decía lo severa y poco receptiva que se veía con esos trajes formales y oscuros, a lo cual ella siempre le decía que por la naturaleza de su trabajo debía vestir así, ya que era abogada y no un payaso de circo, se enojaban por 5 minutos y luego todo volvía a la normalidad, seguido de un empujón al primer hombre soltero que veía en la fiesta.
Casi siendo las 8 de la noche llegaba a la cena
- ¡Rayos!, ella dijo que era una cena familiar, no el siguiente evento de la temporada
Habían filas y filas de vehículos estacionados en las veredas, lo que significaba una sola cosa: su madre le había engañado para asistir a uno de sus eventos de caridad, nuevamente con la esperanza de que conociera a alguien "especial", ahora tendría que ver algo que ponerse, su traje gris con rayas oscuras no sería para nada festivo, buscó un lugar para estacionar y respirando profundamente se dirigió hacia la casa
Ingresó por la puerta trasera a través de la cocina, no quería tropezarse con nadie, al menos no antes de darse un lavado de cara, allí estaba Cassy como siempre degustando los aperitivos antes de ingresar al evento, siendo una diosa total, nunca tocaba un plato una vez empezada la fiesta.
- Hey ya estás aquí, al fin.., debo advertirte que madre está en esos días - ríe - y no hablo de su periodo menstrual
Pongo una cara de sorpresa...
- Ah no lo había notado, pensé que todos esos autos en frente de la casa solo estaban aprovechando el estacionamiento gratuito
- Ay Avy, lo siento debí advertirte - dice mirando despectivamente su atuendo
- Si, ya me di cuenta, no estoy vestida precisamente para una fiesta, y menos para ser la femme fatale - se ríe de sí misma.
- Vamos no es tan grave, como sé de tu rutina me supuse que ibas a llegar tarde y poco arreglada - espeta arrugando la cara - así que te prepare algunos vestidos, ven yo te ayudaré a estar lista antes de que el dragón salga de su cueva - le sonríe
- Bien, pero nada de brillo - objeta en broma y finalmente sonríe antes de pensar que se estaba lanzando a los tiburones.
Media hora después ya estaba lista y descendía por las escaleras hacia el salón de recepción, la mayoría de las familias pensarían que eran millonarios por la cantidad de fiestas que daban anualmente, pero la realidad era muy distinta, no eran ricos, vivían bien pero su padre ingeniero ya retirado, vivía de su pensión, su madre una mujer que nunca trabajó en su vida, tenía recursos, y no hablamos de dinero, sino de contactos, provenía de una familia adinerada, pero al casarse con su padre sus familiares le dieron la espalda, ella sin embargo siguió en ese círculo, lo que le permitió abrir varias fundaciones de beneficencia, de ahí que tenían fiestas todo el año para promover las actividades y recaudar fondos, cuando ingresó a la universidad todos habían pensado que sus padres habían dado un generoso donativo, pero en realidad ella había logrado calificar para una beca completa, por lo que pasó día y noche estudiando y nada de diversión durante su estadía en la escuela de leyes, todos la habían prejuzgado pensando que una cara bonita no podía tener cerebro, incluso su madre hubiera preferido verla casada, antes que verla como una profesional, milagrosamente sus hijas habían optado por estudiar antes que permanecer ignorantes esperando la proposición de algún hombre con recursos.
Llegó el momento de ingresar al salón, a pesar de que llevaba haciendo estas cosas toda la vida, desde que su madre se obsesionó por emparejarla, ya no disfrutaba de estos eventos, se sentía presionada y poco valorada, dio la vuelva en su última lucha por no cumplir los caprichos de su madre, cuando chocó contra un muro, el muro la sostuvo en sus brazos y ella sintió escalofríos inmediatamente, espera...pensó, no era un muro, era caliente, duro y era alto, tan alto que su ojos quedaban a la altura de su torso, cuando estaba a punto de levantar los ojos escucha a su madre que viene por el pasillo, antes de siquiera pensarlo dos veces dice:
- Lo siento, ha sido un accidente, debo irme - y sale disparaba para la primera habitación que encuentra al lado del salón de baile, si su madre la encontraba con un hombre, porque sin duda era un hombre por lo que pudo sentir de su cuerpo, ella trataría de emparejarlos como diera lugar.
Al llegar a la habitación para esconderse, sintió pena de no haberle visto la cara, si era la mitad de bonita que el resto de su cuerpo, hubiera valido la pena el malestar que su madre le haría pasar durante el resto de la velada.
Unos minutos después decidió salir y echar un vistazo por el pasillo, nada de humanos, genial, ingresaría discretamente a la fiesta, saludaría a su madre y luego se escaparía en cuanto se librara de las presentaciones. Entró y vio que había mucha gente, su respiración se volvió más pesada al ver que su madre la había visto entrar y se dirigía hacia ella a grandes zancadas
- Avy querida al fin estás aquí quiero presentarte a algunos amigos, ven...
Sabiendo que no tenía elección ella siguió caminando como un títere, saludando y dando respuestas ensayadas con años de práctica. Luego de 2 horas finalmente vio una oportunidad para escapar y salió por una de las puertas francesas que daban al jardín, sin mirar por donde iba casi atropella a un hombre que se había apartado para hablar por teléfono..
- Oh lo siento - dice nuevamente.
Cuando finalmente lo mira se da cuenta de que es la misma persona con la que se había tropezado antes, ésta vez sí le vería la cara se dijo, pero al mirarle estaba a contra luz y no se veían claramente sus rasgos, pero podía confirmar su teoría anterior, el hombre era alto 193 cm como mínimo y puro musculo, llevaba un traje a la medida, sin duda de diseñador, tenía los cabellos castaños, y la tez parecía bronceada, no le podía ver claramente el rostro, quedaba en la oscuridad. El hombre parecía sorprendido, y a su vez interesado, cuando se dio cuenta de que la estaba observando, hizo lo único que se le ocurrió y volvió a disculparse
- Oh, lo siento, no soy así de torpe normalmente, pero hoy ha sido un día muy largo y pensaba en retirarme discretamente
- ¿La fiesta no es de su agrado? - el hombre preguntó
Dios mío esa voz, tenía una voz ronca, profunda y sensual que generaba escalofríos en su columna vertebral, cuando se recuperó de la sorpresa respondió:
- Oh sí, pero mi madre, ella está en plan de casamentera, y la verdad es que hoy no estoy de humor para conocer candidatos - el hombre dio una media sonrisa y apuntó:
- Entiendo, así que se está escapando - no era una pregunta, era una afirmación, por alguna razón no quiso endulzar la realidad y respondió:
- Verás ya tengo casi 30 años, ella está desesperada por verme casada, me casaría con cualquier hombre que me diera conversación, por lo que le sugiero que mantenga la distancia - dijo al mirarlo seriamente, al desconocido pareció divertirle la idea.
- Oh no es una broma, tome en serio mi advertencia, la cosa es que yo estoy feliz así "por ahora" - le pareció oportuno agregar - estoy bien tengo una carrera, trabajo, casa, auto y tengo metas, ya sabes una vida perfecta.
- Claro - responde divertido
- Y bueno no sé porque le he contado todo esto, debo marcharme antes que me vean, de nuevo lo siento - dijo y se giró hacia el portón, sin escuchar las últimas palabras que le había dirigido el extraño, ni vio la sonrisa en su rostro cuando dijo:
- "Pues yo no lo siento para nada señorita Jones"
Un encuentro accidental desata una obsesión en el conocido millonario narcisista Marcus Castle, jamás pensó que una simple sonrisa le hubiera llevado a la locura y acometer el acto más despreciable de su vida, Anne es una joven llena de vida y muy optimista qué lucha día a día para sobrevivir, en una tarde atroz comete el grave error de cruzarse con el Playboy más famoso de la ciudad, y si eso no fuese suficientemente malo termina arruinándole un traje italiano, creyó que sería su fin, ya que apenas le alcanzaba para pagar las cuentas de la Universidad, quién diría que un simple acto suyo llevaría a un hombre a los extremos para vengarse?, pues cuando Anne pierde su trabajo por el incidente, se postula para ser la asistente del mismo hombre que la arruinó, Marcus aprovecha la ocasión para desquitarse de la mujer que le hizo perder millones de dólares a causa de un retraso, a principio a Anne no le parece tan malo trabajar para él, por supuesto eso fue hasta que descubrió que había firmado una sentencia de esclavitud, al tener que trabajar 24 horas al día para satisfacer a un hombre que se creía el dueño del mundo
Adeline Howland había visto sólo lo peor del amor, siendo una estudiante universitaria sin experiencia se dejó embelesar por un joven apuesto que la sedujo sin ningún esfuerzo y 3 meses después ya estaba prometida para casarse con él, en la noche de su ensayo de bodas su prometido se fuga sin darle ninguna explicación, 1 año más tarde después de arrastrar su desgracia a todos los ámbitos de su vida descubre una manera de superar la herida. Ella se transformará en una mujer calculadora que sólo busca obtener beneficio de los hombres, a partir de allí todas sus relaciones afectivas eran un negocio muy lucrativo, nunca más amor, solo beneficios y diversión siguiendo sus propias reglas, usando su belleza como ventaja su ingresa en el mundo que tanto le repugnaba, la "élite social" de hombres ricos y poderosos, con el único objetivo de ganar dinero y desquitarse de aquellos que se habían burlado de su dolor, así ella se había convertido en la "La especialista", una mujer que podía transformarse en la acompañante perfecta de cualquier hombre con tan solo la firma de un contrato. Todo iba bien hasta que Cameron Black, un multimillonario muy apuesto y desesperado le ofrece 2 millones de dólares para contratar sus servicios, ella cae en la tentación y acepta el trato sin tener idea del lío en el que se estaba metiendo. ----------------------------------- Querido lector Esta novela es la primera de la serie Reinas del Hielo, muchas gracias por su apoyo constante, quiero más noticias sobre mis novelas, síganme en las redes sociales @marylundhautor
Sophie Gates es una ex-agente especial muy reservada que tras una lesión se convierte en detective, está investigando una serie de asesinatos por encargo de un grupo mafioso, no tenía ninguna pista útil hasta que le asignan a ser la protectora de Tomas Clark Henderson, un empresario multimillonario atractivamente excéntrico que no le teme a nadie hasta que es sospechoso del asesinato de la hija del jefe de la mafia que ella investiga, al estar su vida en riesgo éste accede a ser protegido por la detective Gates, siempre y cuando ésta acuerde cumplir con sus reglas poco ortodoxas, ella es obligada por su jefe a trabajar encubierta para mantener las apariencias y proteger a Clark durante su investigación, para su desgracia tendrá que hacerse pasar por su novia y estar pegada a él 24 horas al día al tiempo que busca reunir las pruebas necesarias para arrestar al jefe mafioso que lo puso en una lista negra, mientras tanto un asesino a sueldo pondrá a prueba sus habilidades como agente de la ley, al igual que el enigmático magnate a quién intenta salvar de una muerte segura. ----------------------------------- Querido lector Esta novela es la primera de la serie Agentes Especiales, muchas gracias por su apoyo constante, quiero más noticias sobre mis novelas, síganme en las redes sociales @marylundhautor
Rossalyn Parker era una mujer acostumbrada a los golpes de la vida, a los 7 años de edad descubrió que su padre era un hombre rico y miserable a quien solo le importaba divertirse, tras la sufrida muerte de su madre por el cáncer a sus 16 años queda totalmente huérfana, por lo que aprende a valerse por sí misma para sobrevivir, su sueño siempre fue tener su propia repostería y estaba dispuesta a sacrificar algunos años de su vida en la gran ciudad para lograrlo, su carácter tenaz y valiente siempre hacía que la compararan con la fuerza incontrolable de la naturaleza, al igual que el huracán que había propiciado su encuentro con Aaron Luke Stone, un hombre millonario, narcisista y extremadamente guapo, que al sufrir un accidente durante el desastre natural pierde la memoria y es rescatado por Rossalyn, ella lo cuida durante un periodo de tiempo hasta que él inesperadamente recupera la memoria y desaparece al olvidar de los sucesos ocurridos durante su experiencia traumática, cuando posteriormente se le informa con detalle de lo sucedido durante su desaparición, se obsesiona con encontrarla para compensarle económicamente por su buena acción, pero al descubrir que su salvadora es una encantadora, atractiva, orgullosa e independiente mujer, que en particular detesta a los hombres de su calaña, decide que sus planes para ella necesitan unos pequeños ajustes. ----------------------------------- Querido lector Esta novela es la primera de la serie Flores Silvestres, muchas gracias por su apoyo constante, quiero más noticias sobre mis novelas, síganme en las redes sociales @marylundhautor
Anoche pasé una noche erótica con un desconocido en un bar. No soy una mujer al azar. Hice esto porque estaba muy triste ayer. El novio que había estado enamorado de mí durante tres años me dejó y se casó rápidamente con una chica rica. Aunque actúo como si nada hubiera pasado delante de mis amigos, estoy muy triste. Para aliviar mi estado de ánimo, fui solo al bar y me emborraché. Accidentalmente, me encontré con él. Él es más que atractivo e increíblemente sexy. Como el deseo controlaba mi mente, tuve una aventura de una noche con él. Cuando decidí olvidarme de todo y seguir adelante, descubrí que mi aventura de una noche se convirtió en mi nuevo jefe. Un tipo posesivo.
Danielle reveló sus múltiples identidades secretas. "Ya soy la mujer más rica. ¿Por qué no te casas conmigo? Puedo convertirte en el hombre más respetado". Después de regresar a casa como la legítima heredera, Danielle descubrió que no era bien aceptada por sus padres, peor aún, era despreciada por su hermana y aborrecida por su hermano. Sin más opciones, Danielle tuvo que reanudar sus actividades anteriores, ganándose la vida mientras mantenía ocultas sus otras identidades. Para su sorpresa, Shawn se enteró de sus secretos y le propuso: "Cásate conmigo y haré de ti la mujer más respetada de esta ciudad".
Jenna Murphy se había casado con Hansen Richards, el hombre al que amaba desde la infancia pero el que más la odiaba. Ella creía que él finalmente la amaría. Pero antes de que su sueño se hiciera realidad... Un accidente automovilístico terminó con la vida de su padre y llevó a su madre que estaba entre la vida y la muerte en la unidad de cuidados intensivos del hospital. Su descarado y codicioso tío aprovechó la ocasión y les robó todas las propiedades. Para conseguir los honorarios del cirujano que atendía a su madre, Jenna solo podía estar de acuerdo de divorciarse de Hansen. Pero Hansen la invitó a la fiesta de cumpleaños de su abuela tratando de salvar su relación. Sin embargo, Jenna encontró algunas pistas que mostraban que el accidente automovilístico que arruinó a su familia tenía alguna relación con Hansen..."" "
Hace cinco años, la familia Powell quebró. Madeline Powell dio a luz a gemelos; dejó uno con el padre del niño y se llevó al otro. Años espués, Madeline regresó como líder de Internet de opinión. Sin embargo, alguien se enteró de su regreso. El hombre la pellizcó por la barbilla y se burló fríamente: "Has publicado muchos videos en Internet, ¿qué tal filmamos algo picante juntos?". Los ojos de Madeline se abrieron y su garganta se secó. Al día siguiente, vio a un niño pequeño que se parecía exactamente a su hijo en la casa del hombre. Madeline no pudo evitar besar la mejilla regordeta del pequeñito. Sorprendentemente, el niño no estaba contento. Puso una cara solemne y preguntó: "¿Qué estás haciendo?". Madeline estaba furiosa. ¿Cómo pudo ese hombre haber hecho que su hijo fuera tan desagradable como él?
Después de tres años de matrimonio sin amor, la traición de Neil hirió profundamente a Katelyn. Ella no perdió tiempo y rápidamente se deshizo de ese canalla. Tras el divorcio, se dedicó a su carrera profesional. Alcanzó la fama como diseñadora, doctora y hacker brillante, y se convirtió en un icono venerado. Neil, consciente de su grave error, intentó en vano reconquistarla, solo para presenciar su magnífica boda con otro. Mientras sus votos se retransmitían en la mayor valla publicitaria del mundo, Vincent deslizó un anillo en el dedo de Katelyn y declaró: "Katelyn es ahora mi esposa, un tesoro de valor incalculable. Que todos los que la codicien tengan cuidado".
Kaitlin se enamoró de Alan a primera vista, pero no consiguió conquistar su corazón ni siquiera después de tres años de matrimonio. Cuando su vida estaba en juego, él lloraba ante la tumba de su amada. Eso fue la gota que colmó el vaso. "Divorciémonos, Alan", dijo Kaitlin. Después del divorcio, Kaitlin prosperó en su nueva vida, ganando fama internacional como diseñadora. Recuperó la memoria y reivindicó su legítima identidad como heredera de un imperio joyero, al tiempo que asumía su nuevo papel como madre de dos preciosos gemelos. El pánico se apoderó de Alan cuando vio a los pretendientes alrededor de su exesposa. "Me equivoqué, cariño. Por favor, déjame ver a nuestros hijos", le suplicó Alan.