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Podríamos aparentar y no romper esa abstracción que nos desencaja cuando estamos solos.
Hay momentos que me quedo vacío, sé nada y trato de recordar la última cosa que me ocurrió, pero no algo simple, tiene que ser algo profundo: pensar en una incógnita que me haga sudar, tal vez tiene que estar relacionado con las acciones que quisiera que pasaran; esas ilusiones que rescatan mi altivez del suelo y las levantan a la cima del mundo normal.
Quiero cambiar esa rutina de andar pensando en las personas, en su futuro y demás catástrofes, quiero pensar por un momento en mí, aun con mi inconsciente creo que algo no esta bien; tengo hambre y frío, lo olvido, mastico algo y ya estoy pensando en la persona que preparo el alimento u otra cosa sencilla como pisar el césped, y decir en voz alta "mierda, pise el césped", ¿está bien? Creo que sí, no lo sé, dudo y crítico lo que no sé, debe estar mal a mi percepción, todo va mal en ese círculo que voy creando: mi poder de hablar de los demás en mi cabeza hasta tal punto de olvidarme de mí y el mundo ¿Mundo? Sus incógnitas también están aquí jodiendo de una manera ingrata, me hacen creer que estoy predestinado para estos problemas.
Aunque estoy exagerando mucho, en realidad sí pienso en mí de una manera arraigada a los problemas de la sociedad, específicamente en lo oscuro, me parece interesante el concepto que veo cada día sobre ese tema, lo analizo y lo contemplo en mi vida a lo largo de estos años, la evolución acompañada de mi angustia animal.
Que egoísta soy cuando solo me preocupo por mí, suena absurdo todo lo de arriba, escribo que no pienso en mí cuando en realidad sí hay una preocupación, es mi inconsciente que me sorprende cada vez más, aquí lo veo, mediante estas palabras. Es que juego con la verdad, no hay una regla clara que me lo impida, así quise comenzar esto, engañando a cualquiera que se introduzca en la en mí metafísica, es raro, parece que no existiera; aparece cada vez que estoy aburrido y cansado de las costumbres; son las nuevas personas que pasan por mi costado, me miran y se sorprenden de lo indeterminado que puede ser una persona.
Yo, como esa cosa que cambia en cada accionar del día; gestos, caídas, golpes y muertes que se esconden en el interior de las miradas en cada ser existente, su sufrimiento enferma, hay algún pensamiento racional adecuado para los sentimientos, hasta para las emociones pequeñas, muchos se intimidan por lo majestuoso que puede ser una persona voluptuosa: cuerpo equilibrado, rostro perfecto sin maquillaje, cabellos suaves y peinados extraños, nariz respingada, labios gruesos, cuello mediano, espalda recta, pechos considerables, cintura ancha, nalgas y piernas llamativas. Todo eso se ha creado con anticipación en mi cabeza mientras construyo mi excitación de gusto emocional, cosa que se destruirá en segundos, y así sucesivamente con las cosas que el mundo y sus esclavos me van regalando, un objeto que desea atraerme por ser provechoso y relajador.
Más mierda se acumula en mi cabeza a lo largo de las experiencias truncadas, no se aprovecha el hecho de decidir algo, a veces aparece una cosa más que la otra, me desvía del menos provocativo, yo elegí algo, no lo que está más allá de mi entendimiento. Es la nada, esa ansiedad que hace desperdiciar mi tiempo, como ahora preocupándome de mí, esto se hace interminable mientras más me centro en lo que no tiene que ver el otro, esa gente de mi entorno que aparenta conocerme por criticarme a lo lejos.
Existe el dolor en mi estómago, desde las cuatro de la mañana hasta aquí, en la mesa con el ordenador y algunos cables desordenados que hacen posible esta obra. De inmediato esa palabra se presenta como una construcción, algo que está a punto de hacerse o ya se está haciendo, crearse, sensación de novedad, impulso de originalidad. Sin embargo, esta es mi vida, una obra que aún no acaba y que se va constituyendo con sucesos ya hechos a contragolpe del tiempo, inmodificables, que están ahí para ser descritos por su interprete; yo y mi demasiado yo. Bueno, esta es una presentación a lo que oportunamente encontré de tantas influencias que he tenido últimamente, mucho de lo bueno a pesar de no merecerlo, vagancia y exaltación de un sentimiento que estoy acomodando a mi realidad. El entrañamiento del amor y su incógnita para presentarse concretamente en mi mente y espacio, ese es el impulso, valor que voy tomando como compañero para justificar las cosas que antes no hacía por una visión repetitiva del modelo social que va supuestamente actualizándose. Y debo afirmar que los demás (personas), a pesar de ser pocos y no tan constantes en mi vida, igual son participes, sea cosa especial o no, presiento muchos puntos donde los que están hacen un revuelto con mi camino, enmarcándolo hacía algo que no quiero, pero necesario para pertenecer. Sí, porque esto está relacionado con la pertenencia, la identificación, la sobrevaloración que uno siente cuando contempla su soledad para encontrar algo con que darle juicio a su existencia. Ese momento de demasiado egoísmo, necesario para seguir redirigiendo las acciones que aparentan ser viables hacía lo extraordinario.
El mundo metafísico se derrumba con los hechos perturbadores, no obstante volver a ese círculo es posible con la solidaridad que pocas veces se encuentra por ahí. Es cuestión de esperar lo inesperado para poder de alguna manera renacer.
Charlee fue abandonada en la boda y se convirtió en el hazmerreír de todos. Intentó mantener la cabeza alta, pero acabó humillada cuando recibió un vídeo sexual de su prometido y su hermanastra. Devastada, pasó una noche salvaje con un atractivo desconocido. Se suponía que iba a ser cosa de una sola vez, pero él siguió apareciendo, ayudándola con proyectos y venganzas, todo mientras coqueteaba con ella constantemente. Charlee pronto se dio cuenta de que era agradable tenerlo cerca, hasta que su ex apareció de repente en su puerta, rogándole otra oportunidad. Su amante magnate le preguntó: "¿A quién vas a elegir? Piensa bien antes de contestar".
Stella Richard se casó con Rene Kingston en lugar de su hermana Sophia por algunas razones. Pero desde el principio, ella sabe que su matrimonio era solo un contrato por tiempo límite y una vez que se cumplió el tiempo, ella tenía que irse. Para RK, este matrimonio fue solo una carga, pero para ella fue un regalo de Dios. Porque RK era el hombre al que había amado toda su juventud... Entonces, mientras tanto de su matrimonio, Stella hizo todo lo posible para que este matrimonio funcionara. Pero el día que descubrió que estaba embarazada, su esposo le dio el papel de divorcio y le dijo... "No quiero a este niño. No olvides abortar". Estas palabras salen de su boca, como una bomba para Stella, y cambiaron su vida... Ella firmó su nombre en el papel de divorcio y salió de la casa... Porque ella no quiere estar con un hombre tan frío... Seis años después... RK compró la empresa en la que trabajaba Stella. Pero Stella hizo todo lo posible por no tener nada que ver con él... Porque ella tenía un hijo y no quería que él se enterara de él... Pero un día, cuando Stella recogió a su hijo de la escuela, él la vio... RK, "¿Cómo te atreves a tener un hijo con otro hombre?" Stella, "No creo que tenga nada que ver contigo". RK estaba a punto de decir más cuando su mirada se posó en el niño a su lado... Su rostro se veía igual que cuando era joven...
La vida de Estelle era como un cuento de hadas, llena de amor y promesas. Sin embargo, la tragedia llegó el día de su boda. El padre de Estelle y los padres de Cristofer estuvieron involucrados en un accidente automovilístico que les quitó la vida al instante. La pérdida fue devastadora para Cristofer, lo que lo hizo caer en una profunda tristeza y enojo hacia Estelle. Una tragedia tras otra, Estelle se encuentra luchando contra el cáncer, la desilusión y el engaño. En un mundo donde todo parece perdido, Estelle debe profundizar para encontrar la fuerza para luchar por lo que más ama. **** La voz magnética pero fría de Cristofer sacó a Estelle de su ensueño: "¡Firma el papel de divorcio ahora!". Estelle se recostó, se sentó y preguntó: "¿Bebiste?". "No es asunto tuyo." "Beber es malo para el estómago". "Necesito beber para no sentir asco al tener sexo contigo". "¿No podías esperar para divorciarte de mí?" Su voz sonaba débil. Ella le dio la espalda cuando el humo casi la sofocó, y comenzó a toser de nuevo. "Sabes eso, ¿verdad?" Cristofer respiró deliberadamente una bocanada de humo en su dirección y se sintió inexplicablemente satisfecho al verla toser y temblar.
Kallie era una muda. Su marido la ignoró durante cinco años desde su boda, no solo esto, ella hasta sufrió un aborto por culpa de su cruel suegra. Tras el divorcio, Kallie se enteró de que su exmarido se había prometido rápidamente con la mujer que realmente amaba. Sujetando su vientre ligeramente redondeado, se dio cuenta de que él nunca se había preocupado realmente por ella. Decidida, ella lo dejó atrás, tratándolo como a un extraño. Sin embargo, tras su marcha, ese hombre recorrió el mundo para buscarla. Cuando sus caminos volvieron a cruzarse, Kallie ya había encontrado una nueva felicidad. Por primera vez, él se humilló ante ella y le suplicó: "Por favor, no me dejes...". Pero la respuesta de Kallie fue firme y despectiva, cortando cualquier vínculo entre ellos: "¡Lárgate!".
"¡Ahh!". Ella solo podía gemir, a pesar de que no amaba a ese hombre; de hecho, lo odiaba. Las manos del hombre recorrían todo su cuerpo. Ella jadeó cuando él comenzó a bajarle el cierre del vestido. Este terminaba en su cadera, así que terminó con la espalda y la cintura descubiertas. "No me toq... ¡mmm!". El hombre movió sus dedos por su espalda descubierta y presionó su cabeza contra una almohada. Los toques le provocaron escalofríos a la chica. "Haré que te olvides de sus toques, besos y todo lo demás. Cada vez que toques a otro hombre, solo podrás pensar en mí". ---- Ava Adler era una omega nerd. Los demás la molestaban porque pensaban que era fea y poco atractiva. Pero Ava amaba en secreto a un chico malo, Ian Dawson. Él era el futuro Alfa de la manada Mystic Shadow. Sin embargo, a él no le importaban las reglas ni las leyes, solo le gustaba coquetear con las chicas. Ava no era consciente de la arrogancia de Ian hasta que su destino se entrelazó con el del joven. Él la descuidó y la hirió profundamente. ¿Qué pasaría cuando Ava se convirtiera en una bella capaz de conquistar a cualquier chico y, al verla, Ian se arrepintiera de sus decisiones? ¿Y si ella tenía una identidad secreta que aún no había descubierto? ¿Y si cambiaban las tornas e Ian le suplicaba que no lo dejara?
El marido de Vivianna se casó con ella por su herencia, y después de quitarle todo lo que tenía, la mandó a la cama de un acompañante y le tomó fotos. La amenazó con divorciarse con esas fotos y la obligó a salir de su casa sin un centavo. Dejó su país de origen en desgracia. Cuatro años más tarde, regresó a casa como Jefa de Diseño de Joyas y tuvo un hijo de tres años. Su niño genio le dijo después de bajarse del avión: "¡Conseguiré que el hombre más rico del mundo sea mi papá y te respalde!" Ella lo tomó como una broma, pero dos días después, su asistente le dijo que el hombre más poderoso del mundo se había robado a su hijo y la invitó a cenar. Al encontrarse, ese hombre sostuvo a su hijito y le dijo dominantemente: "Es mi hijo!".