¿Qué pasaría si antes de conocer a tu prometido conocieras al padre y te enamoras de él? ¿Y si ninguno de los dos revela su verdadera identidad y se dejarán llevar por ese amor hasta que fuera demasiado tarde? Cuando Danielle, una joven heredera Italiana de 19 años, acepta comprometerse con el hijo de uno de los socios de su padre, pone una única condición, pasará unos años gozando de su libertad en los Estados Unidos, solo así dirá si al matrimonio por conveniencia que quieren imponerle. Pero el destino es caprichoso y le gusta enredar los hilos que jamás deberían cruzarse. En su viaje Danielle conoce a Enrico, un hombre misterioso y mucho mayor que ella que resulta ser el padre de su futuro prometido con el que empieza una tórrida y enredada relación sin que ninguno sepa la verdadera identidad del otro. Amor, mentiras, erotismo y muchos secretos son la fórmula para llamar al caos. ¿Podrá este amor prohibido superar todos los obstáculos?
No existía sonido más relajante para Enrico Dumas que el que producía un piano, mientras sus dedos largos y delicados se deslizaban suavemente por cada una de las teclas, encontrando la melodía perfecta que calmara su alma, dios sabía cuánto la necesitaba en esos momentos.
- Mi padre está en el salón - Gregory, el único hijo de Enrico, irrumpió sin previo aviso esa mañana en la mansión. El joven cumpliría próximamente los veinticuatro años. Justo en ese instante estaba en la universidad estudiando administración de empresas, finanzas y todo aquello que le hiciese digno sucesor de Enrico Dumas y así convertirse en el futuro dueño de todo aquello que una vez le perteneció; era un hijo obediente, jamás se había rebelado a los designios su padre, hasta ahora.
- Si, pero su padre está...- Matilde, la vieja Nana del joven, trató de frenarlo, era sabido que cuando el señor Dumas se encerraba en el salón a tocar su piano nadie debía de molestarlo.
Enrico deslizaba rápidamente los dedos sobre las teclas del piano, la pieza que interpretaba estaba llegando al momento más álgido, al clímax de la melodía y al de las emociones que tenía ese día, el momento era perfecto su cuerpo se movía al compás que sus dedos imponían sobre el teclado del piano, justo en el instante que Gregory irrumpió en la habitación de manera abrupta, haciendo a Enrico terminar de golpe y de forma estrepitosa su interpretación al piano, volteo a observar a su hijo, su rostro reflejaba una calma que el hombre de casi 50 años no sentía. La vieja nana se quedó parada detrás del joven con la cabeza baja en señal de respeto al hombre frente a ellos antes de excusarse.
- Yo...
- Lo sé, puedes irte Matilde.
No tardó mucho en que la mujer se marchara cerrando la puerta tras de sí, dejando tanto al hijo y al padre en completo silencio y a solas.
Gregory se había paralizado ante la calma de su padre, Enrico Dumas tenía la facilidad, no solo de impresionar con su presencia, también la de inspirar miedo con tan solo observar a alguien de manera fija a través de sus ojos, claros y del color del cielo.
- ¿Qué haces ahí parado? ¿Acaso no venías a hablar conmigo? - su hijo trago pesado al escuchar sus palabras y tardo un par de segundos antes de volver a moverse y aceptar la invitación de acercarse donde se encontraba de nuevo, volviendo a interpretar una pieza clásica en su piano.
- ¿Te han comido la lengua los ratones de pronto, Gregory? - Pregunto de manera irónica Enrico mientras trataba de concentrarse en la música.
Gregory odiaba a su padre casi con la misma intensidad con la que le admiraba, entre ellos jamás había existido una relación padre e hijo, al menos no como se supone debería ser o como Gregory había visto que eran las relaciones, el joven Dumas recordó a sus compañeros en la escuela media y la manera en que sus padres parecían tratarlos, él jamás tuvo nada de eso, Él era el producto de su primer matrimonio su madre murió al dar a luz, el joven suele pensar que ese es el motivo por el cual su padre jamás estuvo de manera presencial en su vida.
- He venido a qué me expliques, ¿Qué significa esto?- saco de entre sus ropas una carta con el membrete de la empresa de su padre junto a instrucciones para que él cortejara y pretendiera a la hija de uno de los socios y mejores amigos de su padre.
-Creo que está más que claro - fue la respuesta del padre hacia su hijo, a quien apenas le dedicó una mirada rápida antes de cerrar sus ojos y dejarse llevar por la melodía que sus dedos producían.
Enrico entendía el motivo de la molestia de su hijo; sin embargo, no daría marcha atrás, Gregory tendría que hacer lo que se le había ordenado, ese matrimonio había sido acordado aún antes de que el joven fuera concebido en el vientre de su madre, en una charla que había tenido lugar entre Leandro Marchetti y él.
- Yo no voy a cortejar, ni a prometerme, mucho menos a casarme con alguien a quien no conozco y que no sé si amare.
El sonido que produjo el piano en ese momento hizo que Gregory diera un paso atrás, su padre había tocado de golpe muchas de las teclas del piano parando de golpe la melodía que interpretaba.
- Lo harás si deseas que todo lo mío te sea entregado al morir - solo hasta ese entonces la aparente calma en el rostro de Enrico, fue sustituida por un momento por la furia, pero así como llegó, esa breve exaltación por parte de su progenitor, se apagó volviendo a su posición y atención al piano; sin embargo, su hijo no podía aceptar ser tratado de esa manera.
- No, no lo haré.
- Entonces tendrás que dejar la casa, los coches y mi apellido, al igual que tu cómoda vida. ¿Acaso crees que tienes derecho a elegir? Ni los propios reyes tenían el derecho de elegir con quién casarse. Las frivolidades tales como el amor no son para gente como nosotros. Hasta tu propia madre, que en paz descanse, entendía eso a la perfección.
Enrico alzó su mirada para notar y presenciar la mirada de sorpresa en el rostro de su hijo.
- Sí, tu madre y yo nos casamos por conveniencia, la conocí una semana antes de casarnos en nuestra fiesta de compromiso, tanto su padre como el mío vieron el potencial que traería la unión de ambas familias, algo muy astuto si me lo preguntas.
- ¿Así que yo no soy para ti más que un objeto, una moneda de cambio?
- Si así es como lo quieres ver.
No le daría más explicaciones a su hijo, tampoco es que tuviera opción, a menos que deseara privarse de todo lo que había estado esforzándose por conseguir tras su fallecimiento.
Enrico dejó de tocar levantándose del taburete y caminar hacia Gregory, quien parecía debatirse entre aceptar su destino o luchar por su cuenta por uno nuevo. Él, como su padre, sabía o podía imaginar lo que pasaba por la cabeza de su hijo.
- No eres el único que tiene que hacer sacrificios - confesó colocando la mano derecha sobre el hombro de su hijo, deteniendo sus pasos hacia la puerta del salón donde se encontraban - Mi próximo matrimonio hará que tu fortuna sea aún más grande, tienes todo un mes para darme la resolución de tu compromiso, viajaré a América por negocios. - palmeó el hombro de su hijo dejándolo a solas.
Ethan y Dylan viven obsesionados el uno por el otro desde el primer momento en el que por casualidad sus miradas se encontraron. Ella es una bailarina de striptease muy deseada por los clientes del bar Lux en el que baila, tras huir de su adinerado y estricto padre. Él es un rico heredero, con una doble vida, amante de las carreras clandestinas y el mejor en estas conocido en el bajo mundo con el seudónimo de Phantom. El romance entre los dos era algo que no podía evitarse, cuando el pide un baile privado con la estrella del bar Lux. ¿Qué sucederá cuando el padre de Ethan muera y él se entere de que no es el único heredero de su padre, si no que tiene una hermana con la que debe competir por la herencia? ¿Qué pasará cuando Dylan sepa que él amante con el que ha iniciado una tórrida relación no es otro más que su medio hermano? ¿Ganará el amor por el dinero o ambos sucumbieran a su pasión prohibida?
Fleur es una chica muy intrépida trabajadora y muy responsable, tras la muerte de sus padres se ve en la necesidad de forjar su propio destino. Una organización delictiva fue la responsable de la muerte de sus padres por lo que ella no desea saber nada de ese mundo por lo que intenta alejarse de todo lo que le parece ilegal y peligroso. Por casualidades del destino conoce a Michael Lewis, un misterioso hombre que la salva de ser abusada una noche en un bar por dos sujetos, para luego convertiste en la niñera de su hijo. Ellos dos empezarán a enamorarse sin ser conscientes ¿Pero que pasará cuando se de cuenta de que su nuevo jefe es también el líder de la banda delictiva que mató a sus padres?
Cuando Ricardo, el Benjamín de los Villamonte vuelve a casa, tras cuatro años estudiando en el extranjero, conoce a Josefina, la hija de la cocinera, y se enamora de ella en cuanto la ve. En apenas 2 meses ya viven juntos y ella queda embarazada, pero la familia Villamonte no está deacuerdo, así que deciden librarse de ella y le hacen creer a Ricardo que ha muerto. Años después él ya se casó por conveniencia con una joven que no ama y el destino hace que se encuentre de nuevo cuando él la contrata como sumisa, aunque no se reconocen ya que ella debe llevar los ojos vendados, pero Ricardo queda completamente prendado con esa mujer, así que esta vez romperá sus propias reglas de no repetir jamás con la misma mujer y volverá a verla. ¿Qué sucederá cuando descubren quién es el otro y los secretos que los rodean?
El dinero no puede comprarlo todo. Jeremy jamás creyó que esa frase no fuera cierta hasta el día en que escuchó esas tres palabras que lo rompieron por completo "Ella no sobrevivió". En ese instante pudo sentir su mundo perfecto desmoronarse. Por mucho dinero que tuviera, absolutamente nada podría devolverle al amor de su vida, a su esposa, su hermosa Marie, y el responsable de todo era un pequeño bebé del que sin duda no quería saber nada. Había mantenido oculta a su esposa, lejos de la prensa y de su propia familia, pero aquello no podía durar mucho, su familia llegaría pronto para conocer al heredero que le habían impuesto para seguir siendo el CEO de la sucursal de su empresa en Washington. Dentro de su desesperación, conoce a Eva, una mujer sin recursos que acababa de tener un bebé la misma noche y le propone un descabellado trato. Ella se convertirá en su esposa y criará juntos a los dos bebés, el que ella había tenido y el de él. Solo había tres condiciones. No podía hacer diferencias con los bebés, jamás le revelaría a nadie la verdad sobre ellos y no podría divorciarse hasta que cumplieran dieciocho años.
Cuando la amiga de Noelia le crea un perfil en una página de contactos y la convence para vender su virginidad al mejor postor, su vida cambia radicalmente. Ella es una joven de 19 años preocupada por el futuro de su madre quien se ahoga en deudas, pero aún así es una persona soñadora y optimista. Él, un noble francés de 38 que dejó de creer en el amor hace mucho tiempo, pero jamás dejará de creer en el poder del dinero. ¿Dónde está el límite de lo que se puede comprar?
Lia es una chica curvi con el corazón roto tras la ruptura de su última relación. Ella está a la espera de que la asciendan en la empresa de electrónica en la que trabaja como becaria, cuándo recibe una oferta inesperada de Evan, uno de los dueños de la compañía. Evan quiere un matrimonio arreglado que a él le ayudará a verse como un hombre íntegro, y no como el mujeriego, superficial que todos creen que es, casarse con una mujer como lo es Lia le hará quedar bien ante los directivos. Por su parte Lia obtendrá y gozará de compensaciones económicas, además de salvarla de la vergüenza de haber sido engañada y dejada por su ex el cual está a punto de casarse. ¿Aceptará Lia el trato? ¿Terminarán Evan y Lia cautivos de su propio contrato?
Stella Richard se casó con Rene Kingston en lugar de su hermana Sophia por algunas razones. Pero desde el principio, ella sabe que su matrimonio era solo un contrato por tiempo límite y una vez que se cumplió el tiempo, ella tenía que irse. Para RK, este matrimonio fue solo una carga, pero para ella fue un regalo de Dios. Porque RK era el hombre al que había amado toda su juventud... Entonces, mientras tanto de su matrimonio, Stella hizo todo lo posible para que este matrimonio funcionara. Pero el día que descubrió que estaba embarazada, su esposo le dio el papel de divorcio y le dijo... "No quiero a este niño. No olvides abortar". Estas palabras salen de su boca, como una bomba para Stella, y cambiaron su vida... Ella firmó su nombre en el papel de divorcio y salió de la casa... Porque ella no quiere estar con un hombre tan frío... Seis años después... RK compró la empresa en la que trabajaba Stella. Pero Stella hizo todo lo posible por no tener nada que ver con él... Porque ella tenía un hijo y no quería que él se enterara de él... Pero un día, cuando Stella recogió a su hijo de la escuela, él la vio... RK, "¿Cómo te atreves a tener un hijo con otro hombre?" Stella, "No creo que tenga nada que ver contigo". RK estaba a punto de decir más cuando su mirada se posó en el niño a su lado... Su rostro se veía igual que cuando era joven...
Ella cayó en la trampa que la tendieron su prometido y su mejor amiga. Lo perdió todo y murió en la calle. Sin embargo, ella renació. En el momento en que abrió los ojos, su esposo estaba tratando de estrangularla. Afortunadamente, ella sobrevivió a eso. Firmó el acuerdo de divorcio sin vacilación. La joven estaba lista para su miserable vida. Para su sorpresa, su madre en esta vida le dejó una gran cantidad de dinero. Ella dio la vuelta a las tornas y se vengó. Todo le salió bien cuando su ex marido apareció en su vida.
Hanna Müller es una atractiva estudiante de medicina, que tiene a su cargo a su hermana de ocho años Mia, tras la muerte de su madre hace ya dos años, ella es su única familia. Para poder mantenerla a ambas, Hanna, de día, estudia medicina, pero por la noche hace de acompañante en una agencia de hombres millonarios. Dentro de sus normas, está no tener sexo con sus clientes, además ella tiene novio. Por otro lado, Roy William Miller, es el CEO, tras su padre, Norman Miller, retirarse el año anterior, lleva la dirección del Grupo Miller, aunque comparte sus acciones con sus hermanos, entre ellas está su melliza Alian. La razón por la que trasladó a la sede central de Miller en Londres es porque quería estar cerca de su hermana, ya que no se fiaba del marido de ella. Una noche descubre a su cuñado con otra mujer, una atractiva y deseable mujer que despierta su interés, al igual que su irá al descubrir que esa preciosidad es una mujer que se vende por dinero. Cosas suceden al mismo tiempo que lo cambia todo. Lo principal Mia, la hermana de Hanna, sufre un accidente, que necesita de una operación y una rehabilitación muy larga. Sólo le queda aceptar la propuesta del maldito CEO de ser su amante por un año, sin ninguna restricción por su parte, excepto la de enamorarse.
Clarissa Chapman, un día, al entregar preservativos a una habitación de hotel, descubrió que su cliente era su... ¿prometido? ¡Atrapó a su prometido y media hermana en la cama! ¡Solo entonces Clarissa se dio cuenta de que su novio de seis años la había engañado! ¿Qué es más ridículo? Su padre dijo que era porque ella no era atractiva y su hermana lo merecía más. Dejó a su prometido idiota, ¡se encontró con su Sr. Correcto en una aventura de una noche! Espera... ¿por qué este hombre se veía exactamente parecido al CEO multimillonario - Anderson Jordan en la televisión? Anderson era de muchas cosas, guapo, considerado y leal. Nunca imaginó que un apuesto como Anderson se enamoraría de ella, hasta ese día... Su familia de pesadilla la encontró, tratando de arrastrarla al pasado miserable... otra vez...
Zen Luo, un joven y prodigioso patrón del clan Luo, perdió todo lo que apreciaba durante una pelea interna de la familia provocada por la codicia. Y después de eso fue esclavizado, pero al mismo tiempo, los impulsos de la venganza se calentaron a fuego lento. Nació una leyenda cuando, gracias al trabajo duro y la determinación, se convirtió en un arma poderosa. ¿Finalmente tendría éxito en vengar a su padre? ¿Llegaría al destino de la inmortalidad? ¿Qué pasaría con los que tratan de matarlo? ¡Lea esta historia y descúbralo!
Llevaba tres años casada con Alpha Ernesto. Sin embargo, nuestra relación cambió drásticamente tras la muerte de su hermano. Él prefirió a la viuda de su hermano, Maia, antes que a mí, su Luna verdadera. Y yo, opté por tolerar todo esto porque amaba a mi compañero y creía que estábamos destinados a estar juntos. Desafortunadamente, las cosas empeoraron cuando Maia me inculpó de su pérdida del niño. Pensé que Ernesto me creería; sin embargo se puso del lado de su cuñada. Con todo esto, decidí que era hora de terminar nuestra relación. "Por favor, Amelia, vuelve conmigo y sé mi Luna otra vez", me suplicó Ernesto. "Ni siquiera cumples los requisitos para ser mi Omega. ¿Qué te hace pensar que querría ser tu Luna?", me burlé.