Honestamente nunca fui del tipo obediente. Si me decían blanco, yo decía negro. Si me decían no, la respuesta era sí. Si mi hermano mayor me prohibió follarme a su muy caliente y muy peligroso mejor amigo. ¡Sorpresa! Jodidamente lo hice. Rompí todas las reglas que no debí cruzar y él me rompió a mí. En mil pedazos.
Lizy.
Hace 4 años.
-¿Es divertido estar al borde de la muerte?
"Que ironía viniendo de él"
La voz del chico que me había vuelto loca desde el primer momento en que lo vi retumbo en las paredes de mi corazón.
Mis pies ni siquiera se movieron, estaba tan acostumbrada a estar aquí que conocía cada centímetro, el equilibrio era una de mis virtudes, después de todo él dice que soy una bonita princesa de ballet.
-¿Qué haces aquí?.- pregunte dando un paso al frente, fingiendo que me tambaleaba hacia el frente, quería saber si se asustaría.
No lo hizo.
Tampoco respondió.
Camino sin temor a la orilla del techo de mi casa, se sentó en el borde con las piernas colgando en el aire.
Di un paso mas al frente, la brisa empujaba mi cabello hacia atrás, me sentía libre, soñaba con esta sensación todos los días.
Libertad.
Saco una caja de cigarrillos de su chaqueta, yo nunca había probado uno, pero él lo hacia a menudo, sus largos dedos envolviendo el tabaco, sus húmedos labios saboreando cada calada.
Lo encendió y volví hasta él, sentándome a su lado imitándolo, mis pies descalzos flotaron en la nada.
-¿Puedo probar?.- pregunte cuando continuo ignorándome, a menudo lo hacía, no le importaba mi presencia.
-Deberías escuchar a tu hermano y alejarte de mí, princesa.- su voz era seductora, no era a propósito, él era así todo el tiempo, envolviendo, atrapando a cualquiera que lo conociera.
-Mmmmh, ¿hola? Tu subiste hasta aquí.- lo mire bajo la luz de la luna, era precioso, el tipo de belleza ruda, intimidante, asesina.
Una vez que te ha consumido no importa cuanto quieras alejarte, solo obtienes más y más obsesión el gris de sus ojos brillaba con la luz plateada y el azul alrededor del gris parecía mas oscuro e intenso, como un animal salvaje.
-No estoy hablando de este momento.
Mis mejillas ardieron, mi corazón quería salir huyendo.
-No se de que hablas.
Se giro en mi dirección, su mano tomo la parte trasera de mi cuello con una fuerza que no creí que sería capaz de usar sentí su aliento en mi mejilla y su toque por todo mi cuerpo, vi sus dientes afilados.
Saboree el peligro en la punta de mi lengua.
-Escúchame con mucha atención princesa porque solo lo diré una vez. Cualquier cosa que tu sucia cabecita este pensando, olvídala, no sucederá porque no estoy mirándote, eres una puta niña y yo no soy tu jodido príncipe, soy el villano, el tipo de la manzana que te envenenará.
"Él lo sabe"
No me moví ni un centímetro, soy imprudente, sí, pero nunca estúpida, si le muestro un poco de vacilación, miedo o duda, aunque sea solo una pizca la tomara y no me dejara vivir.
No hable, las palabras no saldrían de mi garganta, tome su enorme mano con mis dedos.
¿Era estúpido que esto me calentara tanto? Si, denigrante y asqueroso, pero excitante, quería más, necesitaba más.
-Eres el hombre del que estoy enamorada, Kilian, sin importar quien eres.- era la primera vez que lo decía en voz alta, sabía que una vez que lo dijera no habría marcha atrás.
Algo se rompió en su interior, el pequeño reflejo de sus ojos me lo dijo, se recuperó casi inmediatamente.
-Te estoy dando una ultima oportunidad princesa, corre en tu bonito tutú de mierda, escóndete y asegúrate de que nunca mas pueda verte.
"No esta jugando, Kilian nunca juega"
-Lo haré, desapareceré, solo... bésame una vez.- suplique.
Estaba dejando mi alma aquí, mi orgullo y mi dignidad, deje caer un tirante de mi vestido blanco de seda, una de mis tetas se asomó, luego la otra hasta que solo quedaron mis ridículas bragas blancas de encaje a la vista.
La bestia frente a mí no se inmuto, me miro de arriba abajo sin soltarme, entonces dijo las palabras que me perseguirían el resto de mi vida.
-¿Qué es lo que esperas princesa? Con ese pequeño cuerpo tuyo no despertarías ni a la polla mas precoz de la tierra.
Junte las lágrimas detrás de mis ojos, aun así, me desobedecieron salieron corriendo furiosas en dirección a Kil.
-Te enamoraras de mí y cuando lo hagas te arrepentirás de este momento.
Limpio una por una mis lagrimas como si le importara, el fantasma de una sonrisa curvo sus labios.
-Es hora de dormir princesa.
Mi cabello voló en el aire, mi cuerpo desnudo sintió la cálida brisa de verano mis ojos no se apartaron de los suyos mientras caía.
Kilian me dejo caer.
La muerte estaba tocando mi puerta, susurrando que él era un hombre malvado, uno al que no le importaba tirarme del techo y que continuaba con el rostro sin emociones.
¿Lo peor?
Si acaso sobrevivía, todavía estaría enamorada de él.
“La mejor manera de librarse de la tentación es caer en ella” -OW. El gris de sus ojos me perseguía, incluso ahora mientras me follaba a la estrella de natación de la escuela detrás de la iglesia, el cuello blanco sobre la camisa negra, con la mandíbula apretada y su cabello perfectamente peinado estaba el padre Maxime observándolo todo mientras bebía su whisky costoso. Su mirada me encendió. Sus palabras retumbaron en mi cabeza “-Cuando te atrape… Jolie, no habrá nada que te salve, ni siquiera dios” Era una advertencia con una nota de deseo… Y mi cuerpo se liberó, pensando en él.
Ada. Le ofrecieron mi alma en sacrificio. Y el demonio acepto… Mi cuerpo probo el placer y mi alma se mezclo con la suya, para siempre. No era mi intención enamorarme, para él solo era un peón en su tablero de ajedrez, una pieza destinada a morir para que el rey pudiera avanzar, pero lo hice y estaba dispuesta a morir por él, de la misma manera en la que nací. Solo por él. Pay He esperado siglos por ella. Mi venganza. Su destino estaba en mis manos, su vida me pertenecía y el deseo creciente en mi pecho era una lucha que perdería una vez que mis labios tocaran su piel. Su fortuna se había lanzado al aire. Moriría y yo lo disfrutaría… O eso pensé.
Alexander regresó a Río de Janeiro después de cinco años viviendo en Francia. El CEO se sorprendió al encontrar a su ex con un hijo. Nicole no estaba preparada para un enfrentamiento con Alexander. Durante años, ella cuidó al pequeño Alex y se ocupó del trabajo con la esperanza de escapar del pasado. Sin embargo, el destino le devolvió lo que aún trataba de olvidar. Después de años de no saber nada del hombre que la abandonó, ella no reveló los motivos que la llevaron a ocultar la existencia del niño. En busca de la verdad, el Doctor Alexander Bittencourt intenta acercarse con la esperanza de redimirse de los errores del pasado. Pero, hay una barrera construida por el egoísmo y la posesividad. ¿Podrían el tiempo o las omisiones destruir el amor verdadero? A veces el destino nos reparte una jugada extraña y cambia los caminos de la vida El libro Siempre serás mía cuenta la historia romántica y sensual de dos jóvenes enamorados que fueron separados por las desgracias de la vida. Un drama lleno de deseo y pasión, pero con un pasado misterioso y un abismo de dolor.
Rena se acostó con Waylen una noche cuando estaba borracha. Y como ella necesitaba su ayuda mientras él se sentía atraído por su belleza juvenil, lo que se suponía que sería una aventura de una noche se convirtió en algo más. Todo iba bien hasta que Rena descubrió que el corazón de Waylen pertenecía a otra mujer. Cuando esa mujer regresó, dejó de volver a casa, dejándola sola por muchas noches. Finalmente, un día, la pobre chica recibió un cheque y unas palabras de despedida. Para sorpresa de Waylen, Rena solo sonrió y dijo: "Fue divertido mientras estuvimos juntos, Waylen. Pero espero que no nos volvamos a ver nunca más. Que tengas una buena vida". Sin embargo, por voluntad del destino, los dos se volvieron a encontrar. Al ver que Rena tenía a otro hombre a su lado, los ojos de Waylen ardieron de celos y gritó: "¿Cómo diablos lograste seguir adelante? ¡Pensé que solo me amabas a mí!". "¡Es pasado!", Rena se burló, "hay demasiados hombres en este mundo, Waylen. Además, tú fuiste quien pidió la ruptura. Ahora, si quieres salir conmigo, tendrás que hacer cola". Al día siguiente, Rena recibió un anillo de diamantes y un mensaje del banco de que alguien había transferido miles de millones a su cuenta. Waylen apareció, se arrodilló frente a ella y dijo: "¿Puedo saltarme la fila, Rena? Todavía te quiero".
Kaitlin se enamoró de Alan a primera vista, pero no consiguió conquistar su corazón ni siquiera después de tres años de matrimonio. Cuando su vida estaba en juego, él lloraba ante la tumba de su amada. Eso fue la gota que colmó el vaso. "Divorciémonos, Alan", dijo Kaitlin. Después del divorcio, Kaitlin prosperó en su nueva vida, ganando fama internacional como diseñadora. Recuperó la memoria y reivindicó su legítima identidad como heredera de un imperio joyero, al tiempo que asumía su nuevo papel como madre de dos preciosos gemelos. El pánico se apoderó de Alan cuando vio a los pretendientes alrededor de su exesposa. "Me equivoqué, cariño. Por favor, déjame ver a nuestros hijos", le suplicó Alan.
A veces el amor aparece de la manera más inesperada y en la forma de la persona menos pensada. Para Daniel, la vida a sus 40 años es una rutina entre sus tres hijos y su cargo de CEO de la empresa familiar. El fallecimiento de su esposa lo deja inmerso en la tristeza; creando, con el correr de los años, una coraza fría a su alrededor. Deanna tiene una vida normal, trabaja medio tiempo y estudia en la Universidad de Artes porque quiere lograr su sueño: cantar en la ópera. Solo le falta un año para terminar su carrera cuando su amigo Harry le pide ayuda desesperado. Una antigua regla familiar le impide casarse con su novia, la cual está embarazada. Para hacerlo, Daniel, su hermano, debe casarse primero. Para ayudarlo con su problema Daniel y Deanna acceden a fingir una relación y un matrimonio. Son tan opuestos que la atracción es inevitable. Él encuentra en ella la calidez que faltaba en su vida y Deanna el amor luego de una ruptura desastrosa. Finalmente, Daniel puede volver a tener una familia. Pero hay muchos intereses ocultos que buscan separarlos y alejarlos. El viaje es difícil, deben enfrentarse no solo a terceros que les complicaran las cosas, sino también a sus propios miedos e inseguridades. No es sencillo equilibrar 15 años de diferencia. Pero el corazón tiene razones que la misma razón nunca entenderá.
Anoche pasé una noche erótica con un desconocido en un bar. No soy una mujer al azar. Hice esto porque estaba muy triste ayer. El novio que había estado enamorado de mí durante tres años me dejó y se casó rápidamente con una chica rica. Aunque actúo como si nada hubiera pasado delante de mis amigos, estoy muy triste. Para aliviar mi estado de ánimo, fui solo al bar y me emborraché. Accidentalmente, me encontré con él. Él es más que atractivo e increíblemente sexy. Como el deseo controlaba mi mente, tuve una aventura de una noche con él. Cuando decidí olvidarme de todo y seguir adelante, descubrí que mi aventura de una noche se convirtió en mi nuevo jefe. Un tipo posesivo.
En las sombras de la noche, en Caldwell (Nueva York), se desarrolla una sorda y cruel guerra entre los vampiros y sus verdugos. Y existe una hermandad secreta de seis vampiros guerreros, los defensores de toda su raza. Ninguno de ellos desea aniquilar a sus enemigos con tanta ansia como Wrath, el campeón de la Hermandad de la Daga Negra… Wrath, el vampiro de raza más pura de los que aún pueblan la tierra, tiene una deuda pendiente con los que, hace siglos, mataron a sus padres. Cuando cae muerto uno de sus más fieles guerreros, dejando huérfana a una muchacha mestiza, ignorante de su herencia y su destino, no le queda más remedio que arrastrar a la bella joven al mundo de los no-muertos. Traicionada por la debilidad de su cuerpo, Beth Randall se ve impotente para resistir los avances de ese desconocido, increíblemente atractivo, que la visita cada noche, envuelto en las sombras. Sus historias sobre la Hermandad la aterran y la fascinan… y su simple roce hace que salte la chispa de un fuego que puede acabar consumiéndoles a los dos.