ri
entes importantes y tan asiduos con esos chicos. Sentí tanto odio que tuve ganas de romper la botella y amenazarlos para ahuyentarlos de allí;
sé, señor
tanto, ¡pídeles disc
- ¿Por qué tengo que disculparm
rra tus cosas y
. Necesitaba dinero para pagar
te trabajo, s
es de enfrentarme y faltar el
ice nad
sculparte con nu
se puso a mi lado. La pob
usted, pero por favor no despida a Marie. - Prácticamen
har la mirada hacia la cocinera. - ¡Nadie te lme a rogar por mi trabajo, pero termi
todo lo que le pedimos. - Rosa sigu
r, Giuseppe. - Pe
amente. Sabía que, en el f
ero que dejen de trabajar hasta el final del
ra con nosotros, necesita disculparse por su falta de educ
tendría que humillarme aún má
- yo dije e
no cerca de su oído. - ¡Habla un poco más
en! - dije
de una vez, - o
ve que contener las ganas que sentía de tomar un cubo de agua y arrojárselo a esos clientes insolentes. Miré la es
óname,
Por
asar por toda e
ca de nuestro jefe. - Rosa habló con la esperanza de reconfortarm
Sonreí dis
que podrían arruinar la reputación de
n se
venes son de clases acomodadas o hij
ndo, -
cosas, simplemente ignóralas y sigue co
lucraré en los asuntos de los c
ando las comidas s
yo tampoco hice nada malo», fruncí el ceño mientras me quejaba en mis pensamien
ó mi atención. -¡
leyendo mis
s hablando? -
l dedo en la línea que se formaba en mi frente fruncida. - Canta un poco
del capítulo 22 de Don Quijote de la Mancha del autor Miguel
ver
anta para rel
«La Solitudine» de Laura Pausini. Siempre me han gustado las cancion
a noi (La soleda
ntro me (Este sile
a vita senza te (Es la inqui
stro petrificado de Rosa. E
ce al
tas mu
mplacerme, - sonreí tímidamente mientra
s sincero. - ¡Sigue, chica! Pareces un ángel cantando. -
mal. Las horas de trabajo pasaron más rápido. Aunque cantaba, en mi
_________
la cama de su ex-amiga, se rió al recordar el día en que Marie los encontró teniendo relaciones sobre la cama.
os a salir a cen
restaurantes baratos a l
mi amor. Te llevaré a u
entó en la cama. Estaba emocionada por ser tan consentida po
presionar a la hermosa mujer que desfilaba graciosamente con su vestido negro de seda hasta la terraza poco iluminada do
ella mostró sus dientes bla
alrededor de la luna
i amor. - Él tomó el menú.
por haber visto a Marie con Lorenzo en el hospital. No
taba con Marie? - preguntó. Su
o lo
posterior de la mano de su amante. - Ningún hombre
o que Marie siempre te ha engañado, - avivó el fue
o mal de Marie. Quería manchar
mano por detrás. - Tú eres la única que quiero e
uerido. No soy como tu ex que se ha
ía engañado, pero había engañado a su mejor amiga. Estaba tan enamorado que ni siquiera ese pensamiento
tó disfrutar de la cena, pero su amant
ra traicionado, pero fue capaz de engañar a su mejor amiga. Estaba tan enamorado que ni siquiera ese pensamie
tó disfrutar de la cena, pero su amant
ro seguro que ya le ha sido infiel
la cambiará por alguien mejor, - dijo L
edes estar
ena en la cama.
Susie rió mientras de
il veces me
e siempre había envidiado a su mejor amiga y nunca soportó verla feliz. No le bastaba haber robado
era ese hombre poderoso. Aunque sonreía a Lucca, no dej