grandulón; el jefe de seguridad. Ambos me dieron instrucciones de cómo de
me trataron como la cuchara que soy, me trataron como un
inquieta es, ¿cómo servirle al señor Petrova? Ash, tengo muchos nervios, no s
os
e pongo el seguro. ¡Tengo que ser precavida! Sí, no es suficie
e una vez mi mochila para sacar las
e la mansión me la quitaron porque el deber de ellos era regist
soy
s sucios. Ah, estoy cansada, es obvio, ya que estoy rodeada de puros delincuentes. No pedí
. Eso es lo que estoy haciendo. Mi hermano es un egoísta, no me ha cuidado como se lo prometió a nuestros padres el día que murieron, no ha hecho más que sacarme en cara de todo lo que me ha dado y de que le debo demasiado. No quiero ser
a ducha caliente y luego dormir, ya que me t
r en mi primer
spacio en una suave y reconfortante penumbra. Mis pies se deslizan sobre el suelo de madera, aun sintiendo la textura fresc
se dibuja en mi rostro, pero también hay una chispa de emoción en mis ojos. Esta habi
día. La tela cae al suelo con un susurro apenas perceptible, dejándome desnuda frente a mi propio re
comienza a emerger, envolviendo el espacio en una neblina cálida y reconfortante. Paso b
ldosas relucientes, los grifos dorados y la bañera inmensa invitan a sumergirse en un oasis de tran
o y las tensiones acumuladas. Este momento, este espacio, es solo para mí. Y mientras me sum
mi piel. Mis pies tocan el suelo de baldosas frías, un contraste reconfortante después del calor de la ducha. Con movimientos suave
jo. Mis ojos se encuentran con los míos en el espejo, y por un momento, me pierdo en la profundidad de m
eflejo se vuelve claro y nítido, revelando la imagen de una mujer desnuda y vulnerable, pero tambié
e abrumen hasta el punto de rendirme. Aunque el camino por delante pueda ser difícil, sé que tengo la
a específica, y es mi responsabilidad cumplirla con diligencia y dedicación. No importa c
y su carisma pueden ser difíciles de resistir, pero también sé que debo mantenerme firme en mis conv