omodidad en Viola, que al pensar en su marido y su ex amiga compar
na", dijo Ezra, mirando s
o la voz. Luego, se dio media vuelta para ir
e, el hombre son
ué coje
dad se
haré sufrir a esa zorra aún más
n, Viola comentó alzando una c
a su esposo, solo para que
mirar atrás, Viola ap
a! ¡Todo esto e
ra que sea tu objetivo para haber vuelto, ¡no permitiré que lo logres! ¡Ja
e suficiencia a su compañero Richard Lu, aquel niño que empujó a su madre en el aeropuerto. El
ianos, a los débiles, a los enfermos y a los discapacitados. ¡Alguien debería darle una lección!", exclamó Carol con las
istazo, ella le
molest
ra su compañero de clases, no quis
estar cerca de su trabajo, las instalaciones eran las mejo
mente se vengaría mientras
atención de la maestra estaba en otr
haber agarrado barro de una macet
, que sin quedarse atr
se golpearon el uno al otro, qued
hija arrojarle barro al chico, por lo que corrió hacia ella
l paso para disculparse: "Lo siento mucho, señorit
n el que estaba peleando. Seguidamente, tras confirmar que ninguno de los dos estaba her
primero echándome b
e él también estaba sucio, de modo que
voy a defender. ¡No me voy a quedar de br
o la provocaban, y como madre, le molestaba no poder culpar a su pequeña. Así que suspirando, le ordenó: "Esto ti
n de Carol que no se dio cuenta de que Richard era
lo irritaron a los dos niños, que cruzándose de
jardín de infancia intervino: "Señorita A
sto, ¿qué
ndo se pone emocional. Es un chico especial de muy pocas palabras. Espero que pueda entenderlo. Consi
repitió: "¿La prov
reer que su hija hicie
hecho, la primera vez que Carol lo vio en
directora lucía cla
pero después de mirar más detenidamen
reconocido debido a to
d, notó que era idéntico a Ezra. Y pensando en e
ard", los "presentó" la directora inmediatamente. "¿Qué
s de extrañar que Richard sea
pacho de la directora, el par de ex
cara a cara, mirándose a los ojos, dej
abía sucedido. "Señor Lu, esto fue solo un simple malentendido entre los chicos, creo
rtante. No hablaba mu
atrevía a decir algo q
ando protegió a Viola de manera irrazonable. Por ende, temía que también protegie
o su hija era intocable. Así que sería capaz de ha
bien ambos niños merecen un poco de disciplina. Por ahora considero conveniente
pequeña Carol hacién
ejó: "¡Pero mami, él me lanzó barro en la cara primero
r eso que debes disculparte primero,
chiquilla no d
palmaditas en la mano, di
debí haberte hecho ninguna mueca, aunque esa no sea razón suficiente para que me eches bar
ard miró a Selina
culo facial. A estas alturas, Selina se arrepintió de su decisión de hacer que su hija
us ojos, la chica tam
de la oficina. De repente la voz de Moses profunda reso
s brazos de su querido amigo. "¡Oh, Sr. Moses! ¡E
haber estado tan ocupado los últimos días, pero ya estoy aquí. ¿Qué sucedió?". Mientras h
oses y Carol, el rostro de Ez