s entregaba una pequeña caja de magdalenas al último cliente de la tarde. Apen
del local, mientras se secaba las manos tras lavar unos platos. Caminó
a aclarar, sintiendo el calor subir a mis mejilla
e movió y cru
tos así, a menos que haya algo más detrás. ¿Qué es
. "Solo fue un gesto. Me caí, él me ayudó, y
queño suspiro, pero
abras directas, sin rodeos. "No suelo escucharte decir eso d
esponder. Sí, lo había dicho, per
. y bueno, sí, es guapo, pero no es nada má
oyó en el mostrador, su rostro m
amabilidad con algo más. Tal vez te sientes atraída por él, y eso está bien, pero quiero
penetrando esa ligera capa de negac
"No quiero repetir
u tono más suave, p
a dar demasiado de ti otra vez, ¿vale?", co
el local se abrió de golpe, y Lucas entró c
o!", exclamó con entusiasmo, dirigiéndose hacia nosotras mientr
que no quería que Lucas se enterara del nuevo vecin
interés mientras se volvía hacia él, como si
ó el cambio. Se apoyó en el mostra
hoy hizo un escándalo enorme. ¡Sacó toda la ropa de su esposo y la tiró en plena calle! ¿Adivinen por qué? Porque lo cachó c
ido, y yo me quedé mirándol
rédula, aunque sabía que Lucas rar
gate con ella!", mientras le tiraba las camisas y los pantalones. Es más, dicen que se enteró porque la otra mujer llegó a
un drama de primer niv
o de alejar cualquier pensamiento sobre Derek. Lo último que quería era que Lucas añadiera a su repertorio de chismes
mbiando de tema, "¿ya tienes listas las to
os brownies sin azúcar que pidieron para la tarde", le
entregar los pedidos", dijo Luca
antes decir que tenía algunas cosas que hacer allí. A
Según los que me dijeron sobre Marta y su esposo, parece ser que él también usaba el dinero de Marta para comprarle cosas a
piro de incredulidad,
sura de persona. Marta tenía toda la razón en hac
también estaba usando sus recursos para mimar a la otra mujer. Es i
con una fina capa de glaseado y a agregar un toque final a algunas galleta
r devastada", dije, tratando de mantenerme involucrada en la conversación mientr
nica víctima en todo esto. Cualquiera que esté en su lugar prob
s as
n la suya y le regresen todo el dinero que le roba
ndeja de galletas. "Aunque, con cómo está el asunto, parec
, con una expres
obable que su esposo y la amante enfrenten algún tipo de consecuencias. La gente se olvida de la
carle provecho a una situación, es Marta. Seguro
⊱𓇬⊰
tha, mientras termina de acomodar u
iete menos cuarto", respondí, mientras cerraba la pue
panita de la puerta sonó. Me volví, sorprendi
te con tono cálido. "¿T
uedo ayudarte?", le respondí, mi
un aire familiar, como algo que he visto hace poco. ¿Son d
na. ¿Te gustaría probar uno?", le ofrec
e y miró alrededor del local con interés. "Me di
, tenemos magdalenas, tartaletas, croissants, y tam
s probaba el cupcake. "Definitivamente, est
ble y sociable sin ser demasiado directo. Se acercó con una sonrisa profesio
uidado. ¿Hay algo más que te
o por ahora", dijo, tratando de m
sejo sobre cuál es tu favori
d, aunque claramente no estaba interesada
ownies, pero todo aquí tiene su enca
, complacido con
muy natural de hablar. Me parece que disfrutaría mucho charland
a sonrisa educada, si
te apetece probar algo nuevo,
cupcake con
enta. ¡Gracias p
os detalles del día. Aunque el encuentro había sido breve, había añadido un toque de sorp
⊱𓇬⊰
to, soltando las llaves en la mesita de la ent
ró detrás de
bolso en el sofá y quitándose los zapatos de un tirón. "Te ve
ndí mientras me tiraba de espaldas en el so
jada, se sentó a mi lado y me d
o de batalla. Mira este desastre, Elia
de hombros. No estaba tan desordenado, teniendo en c
o, Sam. Sé dónde está
as que estaba en la mesa y dejándolas en una esquina. "Seg
cuidado con el resorte traicionero del lad
dó los
rosa. Lo de s
eé, levantándome perezosamente y yendo a la cocina. "Te ofrezco
pto", dijo, estirándose en el sofá como si se p
ba el agua, la e
fue la última vez que dormist
usa, pensándolo realme
que cuidarte. Entre la pastelería y ahora c
nzándole un cojí
eces con
quivó el co
s a hacerle cupcakes a todos los guapos que te tropiezas,
y ven por tu té!", respo
ó hacia la cocina,
tranquila... por esta noch
de la paz que seguía al ajetreo del día. El cansancio empezaba a notarse en nue
enfrente a ese famoso resorte", dij
, le guiñé un ojo mientr
a en esta cama asesina", respondió ella, ri
brevivirás a todo", dije, mientras apagab
, susurró Samantha, a
dí, antes de dejar que el ago
umbido de la ciudad afuera. Un día más había terminado, y con