dores del hospital, la situación era alarmante, algunos e
é vi
uera de lo normal, como si d
estamos disc
acientes lo sufren, esa habitación está ma
omaste mucho café, deberí
ongo de parte de nadie, pero eso que cuentas es muy extraño, y si de
ero el director me pidi
Cómo te en
nsada, p
entas es tan impactante, nunca había escuchado cosas simil
a nada mal, g
casa, vivía sola, en una casa humilde, a unos 10 kilómet
unas palomitas. Todo bien, hasta que de repente escuché unos golpes en la puerta. La pri
es empezaron a quebrarse, las farolas se apagaron, las casas parecían
ente un sonido de un metal arrastrándose por el suelo, y ahí lo vi, un gigant
ercarse a mí
ath
bras, un señor estaba sentado en mi
Pa
teger detrás de la puerta, el gigante se detuvo unos
her, a
el monstruo había agarrado a mi
EN PAZ, NO L
ritaba ayuda, pero el suelo se separó en dos, dejando en medio u
alguien que no vi por ninguna parte- A veces creemos que podemos arreglar todo problem
me desmayé, y dor