– dijo Nat acomodándole el c
me siento como un pingüino –
ron sus manos, se miraron y se
abitación, donde al verlo
dades! –
stavo – Somos sexys per
imos lo que sea que Gustav
taron juntos – Rusell tiene un lu
ustavo. Rusell se acercó y
a – dijo Nat – Pruébelo y deguste por usted mismo Rusel
usurro Rusell, sabiendo
dos se miraron escasos s
miendo y bebiendo vino. No hubo ni un roce
ar – dijo Greco – Nat, tendrás un ma
rectora en el hospital, mis horarios son muy apretado
rápida hace mucho daño, la estoy metiendo en mi dieta de real food, cero proc
rno – dij
– puso su mano sobre la pierna de Rusell provocando que casi se atragantara c
tre – dijo Nat – Quien
e quedaron con él, entre ellos Jack - ¿Le gusta el vino, Rusell? – s
eo un poco nervioso – El vino es a
nrió – Lamentablemente Nat y yo
o bajaba la cremallera y lentamente entraban los dedos de Gust
je y afinar detalles de la boda y luna de miel
suspiro cuando sintió como
liente y como crecía poco a poco bajo el tacto de su mano. Rusell debió aco
ás tan segu
s demás están explorando el tequila y bueno Horacio y ese tipo a
jadeo – Gu
é he de p
los labios y echó la cabeza
bió el resto de su vino – El vin
ostre – No quería dejarlos sin postre – Gustavo hizo un duro mov
eó tratando de disimular que su pro
tá – le
n corto beso – Eres la mejor – Gustavo aceleró un poco sus movimien
a la cocina que el chisme con
n guiño, suspiro cuando se quedaron solos volvió a ha
mó un tenedor par
en vino Jack – le so
era la mano de Gustavo masturbándolo debajo de la mesa en una fiesta donde están
e tensa tu cuerpo, como masticas con fuerza un simple pay – aumento sus
apretó su mano don
hará más intenso y será mayor el de
suspiro
voz de Gustavo en su oído h
ust
, hazlo p
los ojos, apretó los labios y se dejará llevar por
entrados en su mundo, que la acció
toalla aunque no evitó chupar uno de s
ack. Metiendo su flácido pene en el interior de su pantalón y limpiando lo que más pudo de semen sobre su ro
poco, pero se
sfruta la v
gar sucio Gus
o desde el principio – le di
retiró para ir c
n su frente, tomó su saco y salió
guna chica en la cual descargar tod
.
uto – dijo Gustavo entregá
do lo h
quiero a mi prometid
– Yo veré que no romp
n iguales, cabrones
s – dijo Horacio – Bi
n, me iré dos semanas y b
nemos al diseñador que me hará el traje
ra de que encuentro mi vestid
stro de su chica en sus manos –
y se besaron tiernamente, disfrut
cuando
é amor,
brón, no se mate
é, estaremos bi
pezar a cambiar los canales de su televisión cuando alguien llegó a su puerta - ¿Quién mierda es? – susurro y cuand
e cateo, debo regis
– Gustavo lo jalo dentro
tándole la ropa a Gustavo, quitándole el aliento con cada beso. H
ierna hasta su entrepierna. Tomando la erección de Gustavo, masturbándolo, chupándolo, masajeando sus testículos, lamiendo el larg
, por
a – Justo como yo te di mi orgasmo ayer
mo tocarlo y al poco tiempo se corrió, disfruta
su oído con voz ronca y profunda
lame
s que eso
r detalle de como le partía el culo. Entrando poco a poco, mirando los ges
mover sus caderas, Gustavo lo abrazó, las embestidas eran rápidas y profundas, las uñas de Gustavo marcaban la espal
s del cuerpo de Gustavo, dándose el lujo de que no tendría pareja en
su
ente
, se podía dar
a Gustavo, pero logrando que los dos llegaran juntos a la cumbre del p
nas guardadas de la cena anter
o como
stavo – Esto solo es el principio – lo beso tiernamente