a Ma
uel recordatorio de la caída que sufrí hace dos días en la empresa. Al intentar apoyarme en el lavabo, el mareo se intensificó, me desmayé y golpeé mi ca
mi voz es tan débil que dudo qu
me levanto tambaleante. La habitación parece girar por un momento, pero me estabilizo, apoyándome en la p
ronca, casi inaudible, mie
ns? - Responde u
a y delgada, vistiendo un traje perfectamente ajustado. Sus ojos me obser
gunto, la desconfianz
n asunto delicado con
nocida en mi casa - respondo con hesitació
e, un gesto calculado
desconocida, somos colegas de trabajo. Y le aseg
dole entrar. No me molesto en decirle que no se preocupe por el desorden; lo único que tengo en la sala es un so
mayada en el baño de la empresa... -
inado, era uno de los hospitales más caros de la ciudad, no cualquiera entra al Vivaz - suspiro, sint
de que exija el dinero en este momento seco mi boca. - Fue mi jefa quien pa
a, y mi corazón comien
ipo de
n la mesa y me mira di
y medicación para la cura de su cáncer, y adem
mbre de la moneda brasileñ
gunto, ya no gustando, nadie hace nada gr
ponde, como si simplemente di
k. -¿Alquilarme para qué
na enorme sonrisa en su rostro, como
fendida por ese acuerdo propuesto. - Sé que no teng
Solo para que sea el soporte emocional que él necesita - aclara. - Está pasando
ro, tratando de desci
buenas en él, por eso pe
dulidad. - ¡Ni siquiera sé de quién está hablando! - Digo lo obvio y
vo termina enamorándose de él, no hay problema, siempre y cuando este acuerdo nunca salga a la luz
n pensando en la posibilidad de que me enamore
e encerró en sí mismo y vive alejando a todos. Durante dos largos años ni siquiera salió de casa, y cuando finalmente lo hizo, mostró frialdad y grosería hacia todos. Sus ojos perdieron el color y ella siente que cada día está p
a siempre me quiso lejos -, pero es triste vivir sin esperanza. En los últimos cuatro meses, me he visto en un agujer
go convencida, sintiendo el peso
risita en el rostro, como si no creyera lo q
Me atraganto
edo índice levantado. - ¿Cuándo podré
ratamiento y las asignaciones - responde, su semblante volviendo a ser serio. Suspiro, ¿en qué me he metido? - Mire, ya está en la etapa
s en mi cara, dejando el pulso dol
ivas, realmente esta parece ser la
scar la ropa - in