el azul cielo de la mañana, mientras la caricia helada eriza cada bello de su cuerpo. Estira los brazos y aspira profun
, el cabello lo lleva peinado hacia atrás de ese estilo que aparenta ser despreocupado pero que claramente dedicó horas para darle ese aspecto, es de un color claro, castaño claro quizás, pero sin llegar al rubio, aunque
ules le vienen a la mente un segundo, unas llantas chirriando, la sangre, el olor alcohol, los gritos, el sonido de la sirena de la policía, la sangre, más gritos, el martillo del juzgado y luego su vida rompi
mbre antes mencionado por el hombre y el cargo que ostentaba, así como el logotipo de la empresa y nombre. La chica volvió a mirar al hombre y su elegante traje, así como el lujoso todoterreno y asientos cueros, luego se observó a sí misma, desde los desgastados jeans r
e trabajas. Llevo los últimos diez años de mi vida encerrada tras esas malditas rejas y lo único que deseo es darme un baño de agua caliente que duré horas, llenarme el estómago con un buen plato de comida y no la mierda insípida que comí durante la
uirte una excelente habitación de hotel para que tomes la mejor ducha de tu vida o duermas en la bañera y hasta si así lo quieres puedo buscarte unos chicos de com
sde hacía bastante tiempo y después de mirar al cielo una última vez siguió al hombre al todoterreno sin volver a quejarse siento que l