soledad me invadió. El aire fresco de la noche se mezclaba con el aroma terroso de la madera, pero mi mente estaba en otra parte. ¿Qué era lo que realment
ir, regresar a mi vida anterior, donde todo tenía sentido. Pero algo en lo más profundo de mi ser me decía que eso ya no era p
te seguía perdida en pensamientos oscuros. Cada paso me alejaba más de la figura de Alec, pero no
o, como si el aire mismo estuviera cargado de electricidad. Unos instintos que no sabía que tenía me hicieron mirar hac
ás en el aire. Algo más que no podía ver, pero que podía sentir. Mi corazón comenzó a latir más
te imponente. Un hombre alto, con cabellera oscura que brillaba a la luz de la luna, con ojos que parec
do estuvo a pocos pasos de mí, se detuvo. Sus ojos no se apartaban de los mío
y rasposa, casi un susurro, pero su tono no
? No tenía ninguna duda de que no era un simple humano. Hab
, mi voz temblorosa, aunque in
nrisa amable. Fue una sonrisa que de
no estamos aquí solo para observar. Estamos aquí para
ría a mí? ¿Qué destino? La confusión me invadió, pero antes de que pudi
ban intensamente mientras se acercaba aún más. -La marca de la Luna no es
erse. Él estaba demasiado cerca. El miedo me atena
nsidad peligrosa. Sus palabras me estremecieron-. La manada no permitirá que fracases, Auro
entido se desvaneció, y su rostro adoptó una expresión más fr
urora -dijo, reculando len
ido como había aparecido. Estaba sola otra vez. Pero ya no me sentía compl
¿Por qué la Luna me había marcado? ¿Qué quería Alec de mí
aron, y el deseo de encontrar respuestas se apoderó de mí. No podía escapar de este destino, y a medida que