que saliera temprano a tomar su autobús. A menudo iba tan repleto de gente, que no se deten
helados durante toda su larga jornada laboral
excepción. Pero
tarde, cuando un automóvil de lujo pasó a su lado a toda velocidad, ignorando el e
agnífica memoria fotográfica, apuntando en
río e intentando secarse un poco con una pequeña toalla de mano que
llecido, supuestamente en un accidente de auto, pero ella no lo creía. No le habían permitido re
ientras vivía en un pequeño departamento alquilado. Su casa paterna había ido a p
estaba en la otra punta de la ciudad, en una bonita zona, a diferencia
abello castaño oscuro, sus ojos almendrados y su bella y bien formad
u aspecto era lamentable, cuando entrab
jefe, lucía molesto
de llegar a trabajar, señorita Mari
nni, el autobús no se detuv
o no da a basto con todo. Será mejor que se ponga su uniforme inmediatamente y la ayude
ora voy
z, y sintiendo los pies helados y el cabello hecho un desastre,
i, ya sabes como son
én llegar, y eso que estoy mucho más cerca. Ayúdame con
seg
diado por la demora, intentando a duras penas contener a un niño bastante pequeño. Le dio pena, se veía preocupado y su rostro perfecto lucía consternado, así que se acercó con una sonrisa luminosa, que no le duró demasiado. El
ra. ¿Tan difícil es tomar un maldito pe
echo un fragmento de paciencia, antes de respond
nce antes de llegar. Le aseguro que la comida aquí es ex
e desconcertado por el atractivo enca
tino?- dijo preguntándole con cierta dulzura al pe
ecía increíblemente apuesto y sensual, aunque por lo
a, y un trozo de pastel de vainilla, y un hot cak
y Alessia, acostumbrada a cuidar cada bocad
siado para tu pequeño cuerpecito,
que había cometido, cuando el dulc
¡Quierooooo!
intentó
ue eres un pequeño tan dulce... no
uaa
. enseguida... ense
como si pudiera ases
e mi tarjeta y cóbreme todo
. sie
orazón estrujado. Compungida por haber provocado semejante berrinche sin desearlo, y por la cantidad de comida que
l pequeño, haciendo equilibrio en su bandeja con los muchos pla
e a come
.. qué
O QUE COMA
no puedo, estoy traba
que se sienteeee... quiero que
o, n
siseó el hombre dand
er
éntese si quiere co
se sentó, roja de ira, mientras
señor
efectivo, y los puso frente al señor Gianni-. Le pagaré diez veces lo que
dulidad, y luego al diner
eñor, lo compens
o si fuera una mercancía. Se sentía vulnerable, incapaz de responder, sabiendo que podí
, se veía feliz de hab
me, señori
ella tenía hambre, toda la hu
- dijo él
e iba poniendo en frente, incapaz de levantar la mirada para ver a su
ba rotundamente, mientras qu
n decir nada, tomó una mano del pequeño, que saludó en dirección de Al
vaya a rebajarse con un poco de educa
da de esa manera, su ira creció al ver que amb
a había bañado en agua su