El era empresario,arquitecto,proveniente de la familia mas importante del gremio bancario,mujeriego, millonario,guapo, acostumbrado a que todas las mujeres estén a sus pies a tener todas las que quiera, misterioso, reservado,inteligente, orgulloso y soberbio, moviéndose en los mejores lugares,relacionándose con todo tipo de gente de alta sociedad,no acepta un no por respuesta y siempre obtiene lo que quiere. Ella medico,estudiosa,de clase media,sencilla, reservada,amable,no a tenido novio y no es de llamar la atención de los hombres, sociable.El en su vida quiere es algo nuevo,que lo sorprenda, ella solo quiere algo emocionante en su vida. Un encuentro fortuito cambiarás sus mundos demostrándoles que cuando meno lo esperas puede llegar algo emocionante pero no todo es felicidad. Nueva Versión Amazon Best SEller proximamente físico Novela registrada N. 978958497229-3 Está totalmente prohibida su adaptación, traducción o reproducción sin autorización de parte de su autor. Todos los derechos reservados. all rights reserved.
Era perfecto, estaba ahí acostada en la cama pidiéndome que no me fuera, que me quedara unas horas más; como si en toda la noche no hubiera tenido suficiente, eso ayuda a mi ego debo admitir, creo que no hubo ninguna posición del kamasutra que no hiciéramos; no me gusta ceder el control, la verdad Lucrecia era una de las pocas mujeres que lograba saciar mi apetito sexual, sabe hacer muy bien su trabajo tanto con las manos como con su boca; solo pensarlo ya me prende, pero una noche es suficiente, sacie mi necesidad y es hora de regresar a la vida.
Ella es esa clase de mujer que te ayuda a olvidar un mal día y estar concentrado en solamente sexo, sudor y placer, me vuelve loco para que negarlo, rubia, ojos azules, cuerpo de diosa, sonrisa refrescante, divertida y sobre todo no me presiona, sabe que nuestra relación está basada en encuentros fortuitos, ella aburrida, yo aburrido y en una llamada en minutos nos estábamos divirtiendo o simplemente un mal día y ya estábamos metidos en la cama.
Todos los que nos conocen dicen que hacemos una pareja increíble y como no; la hija de los mejores amigos de mis padres, amiga de mi hermana, tiene todo lo que quiere; nos parecemos mucho en realidad, por eso nuestra relación no puede pasar del sexo, juego y diversión, ella lo sabe por eso nos llevamos de maravilla.
-Vamos nene, no te vayas, quédate un poco más, ni siquiera sale el sol - quitándose las sabanas que cubrían la poca piel de su cuerpo, que tentación, me sonríe y me guiña un ojo - anda, sabes que te quieres meter a la cama otra vez, un mañanero te caería bien.
- A ti te caería bien- reímos - eres una tentación Lucrecia, pero ya fue suficiente y debo irme.
- Vamos Gabriel, no todo es trabajo y negocios, algún día deberías tomarte el día y pasarla bien y yo te puedo ayudar.
- Me ayudaste mucho, sé que no todo es trabajo, estás metida en mi cama, ¿no?.
Hace ese gesto molesto en su rostro de que no le gusto el comentario, se levanta, molesta de la cama y empieza a vestirse, pero si de algo me caracterizo es de ser sincero.
- No te molestes Lucrecia, siempre hemos sido así, me llamas o te llamo, nos vemos, nos acostamos, la pasamos bien y luego cada quién a su vida, a sus cosas, lo sabes.
- Si lo sé, pero... no sé, solo digo que podríamos tener más, nos divertimos juntos, compartimos los mismos gustos en todo y nuestras familias se adoran, así que pensé porque no hacerlo real para todos y dejar de vernos así.
-¿A ver Lucrecia, me estás hablando de tener una relación como novios, flores, citas románticas, agarraditas de mano, fidelidad y todas esas estupideces?, porque sabes bien que no soy ese tipo de hombres, me gustan demasiado las mujeres para amarrarme a una sola, no me gustan los compromisos y en cuanto a nuestras familias, que ellos sean amigos y tengan negocios en común no significa que tú y yo seamos perfectos juntos, así que ve quitándote esas ideas de tu cabeza, como estamos la pasamos bien.
- No digo que no la pasemos bien, ni que hagamos la casita y agarraditas de mano por la calle, ni nada de eso, solamente que yo te gusto y tú me gustas, así que suponía que podríamos intentarlo y ver cómo nos va, no tenemos que ponerle nombre a lo que tengamos, nada más estoy dando una idea.
Se me queda mirando mientras me dice lo que piensa y únicamente imaginar una vida de atadura, problemas, caprichos, adiós, diversión, a las mujeres guapas, empezar a dar explicaciones, ir a compromisos familiares y los negocios. Bueno, siempre dicen que los negocios no se deben mezclar con los placeres y mucho menos con la familia, la sola idea me provoca náuseas, ¿en qué cabeza cabe que yo Gabriel Ziegermman pueda ser todo eso, por Dios?.
- Lucrecia, vamos a dejar algo claro, porque al parecer se te olvido las condiciones de esto acuerdo, tú me buscaste, ¿lo recuerdas?.
- Si Gabriel pero...
-Pero nada fui claro, te dije que si hacíamos esto no quería compromisos, que no creyeras que seriamos novios o que tendríamos derecho a exclusividad y mucho menos pensar en algo serio. Que únicamente sería diversión, sexo y nada más, que nuestros amigos y familia no debían saber para qué no lo arruinaran y pensaran cosas que no son, estuviste de acuerdo, aceptaste cada una de las condiciones y yo las tuyas, ¿ahora me sales con estas?.
- Gabriel, eso fue hace cuatro años, las cosas cambian y yo solamente supuse que tal vez era el momento de dejarnos de juegos y hacer de esto algo más, después de todo sabes que siempre estoy ahí cuando me quieres ya sea para hablar o sexo. Siempre te he apoyado, he estado contigo en las buenas y malas, somos amigos y en la cama nos entendemos a la perfección y sé que nos llevaríamos bien como pareja, ¿por qué no lo podemos intentar?
- Tu misma lo has dicho, como amigos, Lucrecia; amigos que tienen sexo cuando quieren, no hables como si yo soy el que siempre te busco y tú la sumisa que está ahí; porque tú también me has buscado y podría decirse que más de lo debido para una dama - abre los ojos, simulando estar indignada por el comentario.
- Y no me mires, así que sabes que es cierto, yo he estado también para ti, pero no significa que quiera una formalidad, sabes que he estado con muchas mujeres todo este tiempo y yo sé que tú has estado con otros; así que no entiendo por qué cambias de opinión ahora, así que olvídalo.
Tomo mi chaleco, mis llaves y me dirijo a la puerta y solo escucho sus últimas palabras que dice.
-¿Podrías nada más pensarlo?
-¿Para qué?, yo no voy a cambiar de opinión, sé lo que quiero y definitivamente no es una relación seria, ¿por qué quieres que yo te dé eso? ¿Por qué?
- ¡Porque te amo!.
Se va acercando a mí, mientras la veo y pienso, ¿me ama?, esas palabras retumban en mi cabeza, ¿está loca?, no nací para que una mujer me ame, no soy bueno para amar a nadie, solamente hago daño, solo soy bueno en sexo, mujeres, negocios y destruir a mis enemigos, ¿pero amar?, nunca he amado a nadie que no sea mi madre, padre y mi hermana, pero a una mujer que no sea de mi familia. No claro que no.
- Escucha Gabriel, sé que la palabra amor asusta, sé que por alguna extraña razón nunca has querido hablar de amar, que te parece tonto creer que un hombre y una mujer puedan sentir algo tan fuerte que morirían si algo le pasara al otro, pero si existe, ahí están tus padres se aman y adoran como pocos, tu hermana y Sebastián, viven uno para el otro, ¿o acaso no lo crees?.
Mira, sé que tú y yo podemos tener algo hermoso, sé que sientes cosas por mí, si no fuera así no estaríamos cuatro años juntos, no me buscarías para aplacar tus demonios o desahogar tus frustraciones y deseos. Algún día querrás tener hijos, una mujer que te amé, que esté ahí para ti, que sea tu mundo y tú el de ella, ya no eres un niño, no puedes seguir viviendo como uno, debes empezar a pensar en una familia y yo te ofrezco eso y más.
Solo me mira esperando una respuesta y no sé qué decirle por primera vez me hace pensar en un futuro, yo podría tener una familia, una mujer que de verdad me mire por lo que soy y no por mi apellido o mi cuenta bancaria. Una mujer que sea solamente mía y de nadie más, una mujer buena, desinteresada, dulce para aplacar mis demonios, una mujer..., ¿pero qué diablos estoy pensando?, eso no va a pasar, no existe una mujer así, todas son iguales, interesadas, traicioneras, mentirosas. Aparto sus manos de mi pecho y cuando voy a hablar, ella me corta y me dice:
- No digas nada, solamente piénsalo.
Con las mismas salgo de esa habitación.
Lucia Meller es mi vida, me enseño amar, me enseñó a adorarla, me mostró el mundo de forma diferente, le di todo lo que la vida me ofrecía, y se ha ido; se llevó mi vida, mi amor, dejándome el corazón y el alma hecha pedazos. Ahora me duele respirar, me duele amar, me duele la vida. La quiero, jamás podré volver amar a alguien como la ame a ella; la quiero de vuelta, la quiero conmigo, a mi lado donde pertenece; pero por más que la busco no la encuentro, es como si la vida me la hubiera arrebatado y eso me duele, ella me enseñó que se puede matar a un hombre, aunque se conserve la vida, sin embargo, me canse, no puedo llorar por alguien que no me quiere amar y aunque duele, hoy después de casi dos años le digo adiós a mi sirena; después de todo soy Gabriel Ziegermman. Un año desde que me aparte de Gabriel y mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, amar a ese hombre es lo mejor que me ha pasado en la vida, a él le debo el hecho que hoy esté viva y tener a mi lado a mi mayor tesoro, él me enseñó que lo que se desea con el alma se obtiene, pero también me enseñó que amar duele, que su amor duele, a él le debo el dolor más grande, porque dejo de amarme, no fui suficiente para él, me enseñó que su madre, su exnovia y su destino no están conmigo, y aun así lo quiero de vuelta, sé que sus prioridades cambiaron; yo solo pedía una verdad sin embargo él prefirió engañarme y dejarme.Lo quiero olvidar y lo quiero conmigo, aunque no se lo merezca, pero como hago si amar ese hombre es mi arte. Ahora estoy de vuelta y lo único que quiero es tenerlo a kilómetros de distancia, porque me enseñó que yo también tengo derecho a cambiar mis prioridades. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7259-0 Está prohibida su adaptación o distribución sin autorización de su autor. Todos los derechos reservados all rights reserved
Soy Marcelo, el mejor amigo casi hermano de Lucia Meller, médico pediatra y pertenezco a una de las familias banqueras más importante del país, quién le hace la competencia a la dinastía Ziegermman. Estuve fuera del país por mucho tiempo ahora regrese con un objetivo, recuperar Daina, mi exnovia, la mujer que cambió mi mundo. Resulta que cuando decides amar a alguien y terminas con el corazón roto juras que jamás vas a cometer el mismo error dos veces, pero el destino es sucio e irónico y te hace conocer a la persona indicada en el momento incorrecto sin saberlo y terminas haciendo aquello que te hicieron ahora después de años decides buscar eso que dejaste ir. ¿Pero como hacerlo?¿como amar cuando se es lastimado? ¿como pedir perdón? ¿como decirle que la quiero de vuelta? ¿como hacer que confíe en mi? ella solo conoce al mujeriego, prepotente, desconfiado que jugó con ella para dejarla por muchas más y no al hombre que regreso con un solo propósito... ELLA. Novela registrada N ISBN 978-958-49-7482-2 Queda prohibido su adaptación, traducción o distribución sin autorización de su autor. ©Todos los derechos reservados ©All rights reserved
Ella independiente, orgullosa, organizada, terca que no permite que nadie maneje su vida, decepcionada del amor, desconfiada hasta de su sombra y viviendo en un mundo que diferente al que nacio. El correcto, manipulador, terco, reservado, envuelto en los negocios, no acepta críticas ni reproches, su palabras es la ley, maneja todo un imperio donde las dos familias más importante de todo el país son dueños pero oculta un secreto. Una tragedia cambia sus vidas de una manera drástica que los pone de frente en dos mundos distintos. Novela registra con el n°ISBN 978-958-49-7481-5 Queda prohibido su distribución, adaptación o traducción sin autorización de su autor. ©Todos los derechos reservados. ©all rights reserved
Abogada,exitosa,orgullosa, arrogante, dedicada, madre soltera y amorosa; su mundo gira alrededor de sus hijos, juro nunca volver a enamorarse eso hace una persona estúpida y débil en un mundo donde los hombre dominan no puede darse ese lujo. Su belleza es imponente pero no tanto como su carácter, se ha hecho una reputación intachable entre sus colegas trabajando en uno de las firmas mas importantes y prestigiosas del país, tiene todo en su mundo organizado pero todo esta a punto de cambiar cuando se tenga que enfrentar de nuevo a su pasado y decidir dejar los rencores o volver a entregarse al amor.
Hace tres años, Eunice dio a luz a trillizos, pero solo uno de los tres niños sobrevivió, o eso le dijeron. Para heredar la propiedad de su madre, Eunice se vio obligada a casarse con un programador pobre pero atractivo. Después de casarse con este hombre misterioso, comenzó a preguntarse si... Hace tres años, aunque nunca había tenido sexo con un hombre, se había quedado embarazada... No solo eso, descubrió que tenía otro hijo vivo... ¿Cuál sería la verdad? ¿Y por qué su marido 'pobre' se parecía exactamente al magnate multimillonario que había visto en la televisión?
"Tú necesitas una novia y yo un novio. ¿Por qué no nos casamos?". Abandonados ambos en el altar, Elyse decidió casarse con el desconocido discapacitado del local de al lado. Compadecida de su estado, la chica prometió mimarlo una vez casados, pero no sabía que en realidad era un poderoso magnate. Jayden pensaba que Elyse se había casado con él solo por su dinero, por eso planeaba divorciarse cuando ya no le fuera útil. Sin embargo, tras convertirse en su marido, él se enfrentó a un nuevo dilema: "Ella sigue pidiéndome el divorcio, ¡pero yo no quiero! ¿Qué debo hacer?".
En su borrachera, Miranda se acercó audazmente a Leland, sólo para encontrarse con su mirada fría. La inmovilizó contra la pared y le advirtió: "No me provoques. Dudo que puedas soportarlo". Poco después, su compromiso se canceló, dejándola en la indigencia. Sin otras opciones, Miranda buscó refugio con Leland. Con el tiempo, asumió el papel de madrastra, cuidando a su hijo. Llegó a comprender que la decisión de Leland de casarse con ella no se debía solo a que ella era obediente y fácilmente controlada, sino también porque se parecía a alguien que él apreciaba. Ante la solicitud de divorcio de Miranda, Leland respondió con un abrazo desesperado y una súplica para que reconsiderara su decisión. Miranda, impasible, respondió con una sonrisa de complicidad, insinuando un cambio en su dinámica. El señor Adams, que siempre fue el controlador, ahora parecía ser el atrapado.
Kallie era una muda. Su marido la ignoró durante cinco años desde su boda, no solo esto, ella hasta sufrió un aborto por culpa de su cruel suegra. Tras el divorcio, Kallie se enteró de que su exmarido se había prometido rápidamente con la mujer que realmente amaba. Sujetando su vientre ligeramente redondeado, se dio cuenta de que él nunca se había preocupado realmente por ella. Decidida, ella lo dejó atrás, tratándolo como a un extraño. Sin embargo, tras su marcha, ese hombre recorrió el mundo para buscarla. Cuando sus caminos volvieron a cruzarse, Kallie ya había encontrado una nueva felicidad. Por primera vez, él se humilló ante ella y le suplicó: "Por favor, no me dejes...". Pero la respuesta de Kallie fue firme y despectiva, cortando cualquier vínculo entre ellos: "¡Lárgate!".
Amar y ser amada es lo que toda mujer sueña. Sin embargo, lo único que Debbie quería era el divorcio. Llevaba tres años casada con Carlos, un joven multimillonario a quien ni siquiera había visto la cara. Cuando por fin decidió poner fin a su irónico matrimonio e ir en busca de la felicidad verdadera, apareció su supuesto marido y le pidió que lo intentaran de nuevo. A partir de entonces, Carlos se sentía increíblemente atraído por el espíritu libre y salvaje de Debbie y se enamoró de ella. Él comenzaba a mimarla. Poco a poco, lo que había entre ellos se iba a convirtiéndose en una atracción irrefrenable. Esto es una extraordinaria historia de amor donde descubrirá que, a veces, el amor no está muy lejos de cada uno de nosotros.
Mi familia era pobre y tenía que trabajar medio tiempo todos los días solo para pagar las cuentas y estudiar en la universidad. Fue entonces cuando la conocí, la chica bonita de mi clase con la que todos los chicos soñaban salir. Era muy consciente de que ella era demasiado buena para mí. De todos modos, reuniendo todo mi coraje, le dije que me había enamorado de ella. Para mi sorpresa, accedió a ser mi novia. Me dijo, con la sonrisa más bonita que he visto en mi vida, que quería que el primer regalo que le diera fuera el último iPhone de gama alta. Un mes después, mi arduo trabajo finalmente valió la pena. Pude comprar lo que ella quisiera. Sin embargo, la pillé en el vestuario besando al capitán del equipo de baloncesto. Incluso se burló despiadadamente de mis defectos. Para colmo, el tipo con el que me engañó me dio un puñetazo en la cara. La desesperación se apoderó de mí, pero no pude hacer nada más que tirarme en el suelo y dejar que pisotearan mi orgullo. Cuando nadie lo esperaba, mi padre me llamó de repente y mi vida cambió. Resulta que soy el hijo de un multimillonario.