Lorenzo Lombardi es egocéntrico, pervertido, altanero, millonario, inteligente, hermoso y muy despiadado con las mujeres. Está comprometido con Bianca pero sus deseos los satisface con cualquier otra mujer de piernas largas y desnudas. Su diversión se convertirá en su adición que lleva como nombre; Lucía Navarro. Lucía mantendrá su compostura ante semejante macho. ¿PERO, será por mucho tiempo?
No sé en qué estaba pensando cuando decidí aceptar a ésta enana como secretaria, aparte de estúpida, está más ancha que la puerta de mi oficina.
Sus ojos azules y su hermosa boca grande la ayudan un poco, pero ese poco no me convence para verla en la empresa de nuevo.
Hoy mismo la despido.
-Eres todo un actor porno, Lorenzo. -dice lamiendose los labios.
-Eso lo tengo claro señorita, y que usted y yo estemos follando, no significa que deba llamarme Lorenzo, para usted sigo siendo señor Lombardi -digo subiendo la cremallera de mi pantalón.
-Disculpe. -dice ordenando su cabello.
-Puede retirarse -señalo la puerta -Algo más, está despedida -digo sin mirarla.
-Pero... ¿por qué? -pregunta sorprendida.
-Porque soy el dueño de la empresa y yo así lo he decidido -digo recostándome en mi silla mientras la observo fríamente.
Ella me mira mal y recoge sus bragas del piso.
-Esto no se va a quedar así, imbécil -dice poniéndoselo de mala gana.
-Cómo digas, chiquita -digo abriendo unos correos.
Sale dando un portazo y continúo respondiendo correos.
Veo en mi reloj de más de mil dólares que son las 11:20 en diez minuto tengo una reunión importante con Hanna Cruz. Debo convencer esa puta de venderme su empresa.
Los 10 minutos pasaron rápido, mi chófer se estaciona en un restaurante muy lujoso y me abre la puerta para que salga.
-Yo te llamo, gracias -digo arreglando los dos botones de mi chaqueta antes de tomar el maletín.
-De acuerdo señor -dice cerrando la puerta.
Una joven poca atractiva, pero con buenos senos me conduce hasta la mesa en donde está Hanna y me hala la silla para que me siente.
-Muy puntual, señor Lombardi -dice Hanna sonriendo.
-Así es -digo dejando el maletín en un lado.
-¿Para qué soy buena?
-¿Quiere que se lo diga aquí o en una habitación? -susurro tomando la carta del menú.
-Usted es un hombre comprometido -dice levantándo las cejas.
-Eso no quita que no sienta ganas de enterrarme en usted -digo sin mirarla.
-Usted es tan ardiente y egocéntrico a la vez.
-Eso lo sé.
-¿Entonces usted quiere comprarme la empresa?
-Así es, le pagaría muy bien y tal vez le pondría un cargo en ella, siempre y cuando cumpla con los requisitos requeridos -digo llamando a la mesera con un movimiento de mano.
-¿Y de cuánto estamos hablando?
-6 millones de dolares, más la liquidación del personal. Tengo claro que tiene 15 empleados, la empresa es bastante grande y está en un buen lugar.
-Así es ¿ y qué más ofrece? -pregunta dejando la carta a un lado.
-Un polvo inolvidable -digo rosando su pierna con mi pie.
-Tiene un buen don para convencer.
-Tengo dos dones -la miro y me acerco un poco más.
-¿Cuál es el otro, señor Lombardi?
-El de hacerla venir con tan solo besarla.
Ella cayó en la trampa de su hermana y tuvo una aventura de una noche, y, peor aún, se quedó embarazada. Cuatro años después, cuando regresó con su hijo, un caballero encantador apareció en su vida. Desde el momento en que ella lo vio, le pareció familiar, pero no encontró la razón hasta que vio a su hijo junto a él.
Luego de que mi cuarta secretaria, de las que tuve este año, me dijo que renunciaba, decidí que mi próxima secretaria sería fea, así no me dejaría para casarse con alguno de mis millonarios contactos. Mi empresa no es para que las secretarias busquen marido, por eso quiero una secretaria fea. Mi socio me dijo que por más que una mujer sea fea, igual se podía querer casar…Pienso que si es fea, nadie se va a casar con ella. Mi madre se enojó por mis pensamientos y mi hermana sonreía. Finalmente obtuve a mi secretaria fea, y yo, tan obsesionado con el tema, estaba feliz. Denis, es la hermana de un amigo mío, él es acaudalado, al igual que yo, mi obsesión, no me permitió ver con claridad el porque ella trabajaba de secretaria siendo millonaria. Descubrí que ella es la mejor amiga de mi hermana, y que lo único que tenía feo, solo era ese horrendo disfraz… No sabía el porqué se presentó vestida como su abuela, pintarrajeada como un espantapájaros y con esa peluca horrenda, mi obsesión mutó, tenía que saber que tramaba… Ella es…una mentirosa profesional y…la mujer más hermosa que vi en mi vida.
Durante dos años, Bryan solo vio a Eileen como asistente. Ella necesitaba dinero para el tratamiento de su madre, y él pensó que ella nunca se iría por eso. A él le pareció justo ofrecerle ayuda económica a cambio de sexo. Sin embargo, Bryan no esperaba enamorarse de ella. Eileen se enfrentó a él: "¿Amas a otra persona y siempre te acuestas conmigo? Eres despreciable". En cuanto ella firmó los papeles del divorcio, él se dio cuenta de que era la misteriosa esposa con la que se había casado seis años atrás. Decidido a recuperarla, Bryan la colmó de afecto. Cuando otros se burlaban de sus orígenes, él le dio toda su riqueza, feliz de ser el marido que la apoyaba. Eileen, que ahora era una célebre CEO, lo tenía todo, pero Bryan se encontró perdido en otro torbellino...
Durante sus tres años de matrimonio con Colton, Allison ocultó su verdadera identidad y se esforzó de todo corazón para apoyarlo. Sin embargo, fue traicionada y abandonada por su esposo infiel. Desanimada, ella se propuso redescubrir su verdadero yo: una perfumista de talento, el cerebro de una famosa agencia de inteligencia y la heredera de una red secreta de hackers. Al darse cuenta de sus errores, Colton expresó su arrepentimiento: "Sé que metí la pata. Por favor, dame otra oportunidad". Sin embargo, Kellan, un magnate que se suponía que era discapacitado, se levantó de su silla de ruedas, tomó la mano de Allison y se burló desdeñosamente: "¿Quieres que te acepte de nuevo? Sigue soñando".
El matrimonio no fue más que en beneficio de las dos familias. Podía elegir a cualquiera para que fuera su esposa, pero en el momento en que la vio, supo que ella era la que quería. Sin embargo, su matrimonio no duró mucho debido a su indiferencia. Hasta el momento en que firmó el acuerdo de divorcio, finalmente fue testigo de sus verdaderas intenciones. Resultó que ella también se aprovechó de él. Su divorcio no fue el final sino el comienzo del verdadero juego del amor.
El día de su aniversario de boda, la amante de Joshua drogó a Alicia, que acabó en la cama de un desconocido. En una noche, Alicia perdió su inocencia, mientras la amante de Joshua llevaba a su hijo en el vientre. Desconsolada y humillada, Alicia pidió el divorcio, pero Joshua lo consideró una rabieta más. Cuando finalmente se separaron, ella se convirtió en una artista de renombre, admirada por todos. Consumido por el remordimiento, Joshua se acercó a su puerta con la esperanza de reconciliarse, solo para encontrarla en brazos de un poderoso magnate. "Saluda a tu cuñada", dijo este.