amente, tratando de acostumbrarse a la luz que inundaba la habitación. Desorientada, se sentó en la cama, mirando a su alreded
oche anterior y, confundida, reparó en la manta que le cub
sido?" se preg
el único que vivía en aquella mansión, y la idea de que él había entrado en su habitación mientras ella dormí
pies por el suelo frío y se dirigió al
lanco y un suelo de cerámica brillante que reflejaba la luz. Una bañera mod
que todo estuviera perfecto para ella, a pesar de no estar obligado a h
lajarse durante horas. Aquel gesto hizo que sintiera la necesidad de agradecerle por ello. No era algo que podía permitirse siempr
do si era correcto bañarse de esa manera. La verdad era que se sentía incómoda al estar desnuda, sabiend
a la habitación. Sin embargo, recordó que no había traído nada d
me pondré?" pensó, mordie
No podía salir así y permitir que Evan la viera solo con la toalla alrededor de su c
se de la cama, comenzó a caminar de un lado a otro, trat
ocurrir... -murmuró pa
e abruptamente. Miró en dirección a la puerta y,
?" se pregun
eabrió la puerta, escondiendo gran
Evan, pero rápidamente los desvió h
inmediato se apoderó de su rostro,
ndo el silencio-. Tu padre ha p
a. Al ver que el pelinegro no parecía tener intención
igo de algo importante -respondió, su
rando la puerta al verlo
rtenencias de la maleta para guardarlas ordenadamente en el armario. Sin embargo, se llevó una grata sorpr
el gesto también había sido obra de Evan. Era un hombre que no dejaba esc
ería ser ingenua. Sabía que este interés probablemente tenía un trasfondo; era evide
a de mármol la hacía sentir como si formara parte de una película, ante la majestuosidad de lo que sus ojos contemplaban
del espacio. Las paredes pintadas de un blanco marfil, estaban adornadas con cua
por grandes ventanales de vidrio que dejaban entrar la luz del sol. Había varios sofás de terciopel
Su cuerpo reaccionó de manera automática al verlo, sintiendo cómo la tensión se apoderaba de s
rdia. Después de todo, no se encontraba en su hogar ni con
des servirte lo que quieras -le dijo él, e
a joven le llevarían mucho más tiempo del que había anticipado. Ella continuaba mo
, pero se desvaneció casi de inmediato-. También agradezco lo que has
ín restándole importancia, pero percibi
contigo y tu familia. Bastante es vivir aquí sin costo alguno. No pretendo aprovecharme d
le incomodaba el orgullo que ella mostraba. Decidió no comenta
ibre de creer lo que quisiera. Pero jamás había pensado que era una aprovechada-. Espero que no sea un problema para ti comer
ejó de ella, dirigiéndose hacia la