an
antal -Amber la miraba preocupada-. ¿Te s
decía mientras tomaba
star comiendo. La había arrastrado prácticamente para almorzar juntas. No era su costumbre, se supo
uerpo la mayoría del tiempo. Ni siquiera había ido a las oficinas de "Luxury Voices" en tres días s
papas lo haré yo -l
adora de cosas fritas -rio la rizguiñó un ojo-. ¿Cómo va todo en la revista? -la sonrisa d
o lo relacionado con es
amiga, ¿recuerdas? -le decía
No me siento con el derecho de decirle a de
dijo con molestia y tono comprensivo-. Eres más fuerte que eso, y s
en sus palabras-. Esta tarde iré a ver Derek. Me
darte -un tono de puro optimismo salía
ontar sobre Robert y Clarisse y toda la c
res no tiene nada que ver con las que tomes tú de ahora en adelante -la mir
iado marketing como Robert quer
aste a tu padre para elegir lo que de verdad querías estudiar. Te esforzaste como nadie para conseguir una beca
ades comiéndome por dentro, supongo -le dio una s
a-. Sabes, cambiando de tema, hay algo que
al la miraba expectante. Am
a sonó y esta sonrió. Le
mento, "Chan-Cha
miró extrañada. Ese brillo en la cara de su amig
taba segura si debía hac
ponía de pie-. No sabría que hacer sin ti -esta le dio un
aña fue reiteradas veces el fuerte en el que ella iba a llorar y a tener algo de paz. Era su amiga y a veces la creía de su propiedad. En ocasione
. Subió al elevador. Tomó un respiro profundo antes d
ina, una gran puerta plateada al final del pasillo. Pasaron solo unos días desde la última vez que estuvo ahí que para ella habí
os de humor que esta experimentaba desde su embriaguez a su estado de sobriedad. Culpaba a esa mujer, pero muy en el fondo sabía que
llegado tan lejos para eso. Estaba decidida
s abandonado -Debby se había cansad
antal con ironía-. No, no los abandoné,
creíble como te justifica
o?-Chantal la miró directo a l
ge y Dixon junto a su padre lo financian, pero sin mis ideas no serían nadie -su tono de voz iba subiendo y cada vez era más rápido-. N
ó de emitir palabra de un brinco-. No deberías estar atacando a C
los. Se veía imponente, fiero. Un aire de superioridad le llenaba la mirada. Los labios en una línea apretada dispuestos a desgarrar con sus palabras a quien se
te, cosa que a ella le parecía absurdo cuando
a a la pelirroja que, avergonzada, bajaba
molesta y con la cabeza en alto. Mi
tan ponzoñosa. Por esa razón no le gustaba socializar con otras personas fuera de su círculo. No todos eran iguales y pocos la entendían como Anne y Amber. En momentos como
ía la odiaba y la ofendía, y al otro se enfrentaba a Debby porque la trataba mal. Sin dudas Dixo
unque quería abandonar no se echaría a atrás. Hace par de minutos pudo haber retrocedido, tomar el elevador y desaparecer. Mas, no lo hizo,