amores posesivos

Amsterdam, otra bella ciudad romántica, con numerosos canales y puentes para pasear; una bella y romántica ciudad de Europa, en donde vive una tierna, amable, carismática y hermosa chica de 24 años de edad llamada Avary Cross, estudiante de comercio industrial (cumpliendo con los deseos de sus padres).

-Despierta niña- dice su amigo Arthur -ya es hora de levantarte-. Arthur y Avary son amigos desde niños, la familia de ella lo conoce muy bien teniéndole suficiente confianza, este siempre a estado enamorado de Avary pero lo mantiene en secreto, sueña y desea tenerla pero siente miedo de no corresponder y perder su amistad.

-ya estoy lista- dice Avary, -a donde me llevaras a desayunar esta mañana- mientras va bajando las escaleras de su casa, y Arthur la mira con deseos de hacerla su novia, -ya basta pendejo- dice Avary, -deja de mirarme así y ya vámonos, se me hará tarde para la primera clase- continuo diciéndole, a lo que Arthur le respondió -llevo horas esperando a que estés lista, y mi estómago ruge como tigre-.

Avary y Arthur se conocen desde niños, ambos tienen varios cosas en común, les gusta escuchar el mismo tipo de música, ella va a la misma Universidad a la que Arthur asistió, les encanta viajar y conocer muchos lugares, van como de costumbre a admirar las obras en el famoso museo de Vangogh, hasta ir a comer a los coffeeshops.

-Vamos a desayunar donde siempre- pregunta Arthur a Avary, a lo que Avary asintió con la cabeza y seguidamente le respondió -pero primero pasemos por Camil si- con cara de querer convencerlo y siempre logrando lo que ella quiere.

Llegan así a casa de Camil, tocando la bocina insistentemente y esta sale rápidamente de la casa toda despeinada riendose Arthur de ella, a lo que Camil lo ve y le dice -no aceptó burlas chico, acabo de despertar, estoy sumamente agotada pues la fiesta de anoche dio mucho de que hablar, tal un día de estos te presente a alguien Ava, pero tranquilo a ti también Arthur-

Riendo estos de lo dicho por Camil, ella sube al auto de Arthur y fueron al café de costumbre por desayuno para los tres donde comieron tostadas, panque mermelada y café, compartiendo una mañana simple pero con muy buena compañía.

Al terminar su desayuno, se marchan a la universidad para que las chicas asistan a clases, se despiden y Arthur pregunta a Avary si pasaba por ella al salir y esta le respondió que mejor no, pues tenia que hacer unas comprar con Camil luego. Seguidamente Arthur se retira a trabajar diciéndose -aquí vamos Arthur, otro día más al lado del gran Harry Finish y su prepotencia-

Avary, es una chica casual, muy estudiosa, tranquila y de poco sociabilidad, más sin embargo le gustaban un poco las fiestas universitarias con las que iba siempre con la alocada Camil, fiestas a la que ella estaba acostumbrada y Avary no.

A pesar de los distintas que Avary y Camil eran se llevaban muy bien,una compensaba el carácter de la otra, y Camil era su mejor consejera y la que la hacia poner los pies en la tierra de vez en cuando.

Camil, invita a Avary a celebrar una fiesta de los graduándos de la universidad, y esta accede después de decirle muchas veces a su amiga que no, pero la insistencia de Camil hizo que Avary asistiera, -Lo sabia tarde o temprano siempre terminas complaciendome-, dice Camil entre risas, -¡Diablos Camil, eres tan terca como el tonto de Arthur!-. Respondiéndole Avary negando con su cabeza.

-ok querida amiga mia, cuenta que traen tu y ese obstinado chico Arthur- pregunto interrogantemente Camil, -nada Camil realmente nada amiga, solo sólo par de amigos no más- respondió Avary, dándole a Camil una cara de molestia y fastidio, a lo que Camil respondió -ok ok ok amargada chica-.

En esta fiesta a donde habían asistido, se encontraban muchos chicos, y Avary pensaba si algún día llegaría alguien que pudiera llenar sus expectativas, cuando de pronto se sentó alguien a su lado, era su amigo Arthur a quien Camil había invitado a la reunión.

-Hola nuevamente niña, soy yo de nuevo, ya no vas a sentirte tan aburrida pues ya llegó el alma de esta alucinante fiesta- dijo Arthur sonrientemente, a lo que Avary riendo le contestó -que tal chico eres muy atrevido, creo que me andas siguiendo verdad- lanzándole a Arthur una mirada irónica junto a una sonrisa pícara.

Avary decide irse de la fiesta, y le comenta a Arthur para marcharse pronto pues ya no estaba muy a gusto allí, -Avary a donde quieres ir ahora inventadora chica, mejor vamos a casa, ya es tarde para andar por alli- dice Arthur.

-No y que eres el alma de las fiesta, que aburrido- dice Avary burlándose con una carcajada de Arthur. Ambos deciden marcharse así a casa de Avary pues esta aceptó que era demasiado tarde, y que le costaría despertar en la mañana.

Avary tenia un importante juego de tenis a la mañana siguiente, motivo que ella pensó y acepto que Arthur la llevará a descansar, partido al que por supuesto Arthur no iba a perderse, como no se había perdido los demás de la temporada.

Llegando a casa de Avary, Arthur se despide muy galantemente al llevarla a la puerta de su casa esperando una respuesta sastifactoria de Avary pero nunca ocurrió. - hasta mañana Ava, preparare bien para tu gran partido de mañana, habrán chicas mejores que tu- dijo Arthur riendo y a su vez retirándose rápidamente de la entrada.

A la mañana siguiente...

Avary Cross:

-Que noche, no pude descansar muy bien, no debí acostarme tan tarde, me levantaré para arreglarme y así esperar que Arthur venga por mi, ya perece mi sombra en chico es tan buen amigo, y un gran protector, quedan pocos hombres como el.

Debo ir hoy dispuesta a todo, es el ultimo juego de esta temporada, al terminar este torneo y ganar me enfocare en comenzar mis pasantías, debo buscar quien me pueda y quiera contratar...

Me dirijo a buscar mi blanco y limpio uniforme del equipo en el cuarto de lavado, ya mama lo dejo todo planchado, al bajar consigo a mis padres desayunando, a quienes abrazo y saludo muy cálidamente, les preguntó si irán a la cancha a apoyarme pues era el último partido de la temporada, y el que me definiría o no como campeona, esperando que pronto me puedan invitar a participar en el wimbledon, allí solo entran los mejores del mundo y se que yo lo conseguiré.

A lo que mis padres respondieron alegre y orgullosamente que por su puesto no se perderían por nada del mundo el partido. Me marcho nuevamente a mi habitación a terminar de arreglar todo-

Suena una bocina, era Arthur quien como todos los días pasaba en busca de Avary. -¡Bajando!- grita Avary desde su habitación, -Ya casi lista-, encontrándose Avary lista con su perfecto cabello, ropa, bolso deportivo, y zapatos arreglados a la perfección.

Arthur Miller

-Wuao allí viene Ava, tan perfecta, toda ella es hermosa, así simple pero bella tiene un perfecto súper sedoso y brillante cabello negro, su piel es tersa y blanca, con esos grandes ojos verdes capaz de deslumbrar a quien quiera y de enamorar a cualquier tonto, incluso hasta a mi, sus hermosos labios rosas son perfectos para besar.

Es una mujer espontánea y su forma de ser es cautivadora cariñosa y tierna, insisto podría hacer babear y dejar sin palabras a muchos, se que Ava llegara muy lejos, es tan pero tan ella, el suspiro de muchos en realidad, espero solo algún día poder corresponder su amor, mientras tanto me tocara con solo conformarme con ser su mejor amigo-...

Inmediatamente se aproxima Avary al auto de Arthur, en donde el la estaba ya esperando, preguntandole intrépidamente a este -¿que tal me veo, parezco profesional?- ni tanto tarada, sube ya que llegaras demasiado tarde- respondió Arthur, aguantando sus ganas de abrazarla y besarla, es ese instante procede a cerrar la puerta del auto después de dejarla entrar, acercándose a ella para apreciar su delicado y dulce aroma.

En el camino iban conversando y Avary por un momento recuerda lo de sus pasantías, y se toma el atrevimiento de preguntar a Arthur por la prestigiosa compañía donde este se encontraba trabajando diciendo -que tal son tus jefes Arthur- a lo que Arthur niega con la cabeza haciendo un gesto de disgusto y a la vez un poco evasivo a su pregunta, comentando -ni para que hablar de eso Ava, realmente me siento muy a gusto en la empresa y por supuesto con mi área de trabajo, en su mayoría mis compañeros de trabajo son amigables y colaboradores, pero mi jefe, mi jefe no es del todo amoroso, pero ya Ava eso hoy no importa lo mejor es que te concentres, mira que hoy es tu día, no el día de "averigüemos el trabajo de Arthur" si. Finalizo.