ndri
tre sensualidad, elegancia e inteligencia. Al principio la noté sorprendida por mi presencia, pero rápidamente la seguridad había vuelto
Siempre me había sido fácil abordar a las mujeres, así como lo había hecho con ella, la primera vez; pero a
te para mí. Había vivido mi vida soltero y el éxito era mi mayor recompensa. Pero maldita sea, aquí estaba yo, yendo tras una desquiciante niña y no entendía ni por qué me tomaba la molestia. El efecto que despertaba en mí, era coentré al ba
ojos se abrieron demasiado, cuando se encontró con mi
é hasta ella, cubriendo su boca con una man
ia entre nuestros cuerpos era nula, su nariz casi rozaba mi pecho y yo fácilmente podría reposar mi
a. Aquella acción me excitó más, sentí la sangre
me! -Bufó, en cuanto libe
as corriendo, "Ange" -dije firme -...
omo me llames! -Gruñía, c
en
-Hice una pausa. Ella no dijo nada, sólo me observaba, como analizando mis palabras, así que proseguí -. Quiero deleitarm
na eternidad, su reacción se h
eresada en pasar una noche con usted? - Levantó liger
rocé las puntas de los dedos sobre su cuello, y su piel me dio la razón -. Tu respiración entrecortada -susurré muy cerca de sus labios. Un jade
ó sa
pal se abrió y el repiqueteo de unos tacones contra el pis
lentamente, aspirando, con deleite, el aroma dulce de su cabello; ella no me apartó, así que la tomé por la cintura, atrayéndola a mí, ro
cerrándose. En ese momento, mis labios estaban demasiado cerca a los de ella, pero antes que pudiera hacer cualquier movimiento,
a te dije, YO NO BE-SO A NA-DIE -p
r, quería vo
taló en su mirada. Sonrió de medio lado -. Me la pensar
a vez que mi calentur
una de las que hubiera visto antes, era una sonrisa genuina y despreocupada, no había poses en ella. Carraspeé para disipar el instinto asesino que despertaba en mi interior, me cabreo el da
y su rostro se tornó indescifrable. ¡Mierda! Daría lo que fu
tás diciendo
egocios. Acordamos una reunión en dos días, con nuest
a fue un NO, rotundo. Mi obstinación era grande, pero su orgullo se la llevaba de calle. Me rendí al final
ólo dos días estaría